El secretario general del PP, Teodoro García-Egea, ha asegurado hoy que su partido "no descarta ninguna vía" para impedir que los presupuestos de 2019 "entren en vigor" y ha añadido que ya ha comenzado su "ofensiva" parlamentaria contra un proyecto que considera "falso, falaz y malo para España".

En rueda de prensa en el Congreso, García-Egea ha respondido así al ser preguntado por si el PP se plantea acudir al Tribunal Constitucional para recurrir unas cuentas del Estado basadas en unos objetivos de déficit remitidos a Bruselas que no han sido aprobados por el Parlamento.

El PP, ha añadido García-Egea, exigirá al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que diga si Pablo Iglesias tiene su "autorización" para negociar "en su nombre" los Presupuestos con el dirigente de ERC encarcelado Oriol Junqueras y "si está de acuerdo" en que negocie "en nombre de todos los españoles" con quien "está acusado por los jueces de intentar romper España".

Ha hecho hincapié en que la ley de presupuestos es la que "garantiza" la igualdad de los españoles y la distribución de la riqueza para acabar con las desigualdades y, en ese sentido, ha preguntado al Ejecutivo si "se puede negociar" esa ley "con un señor que quiere romper con ese principio".

El secretario general del PP ha considerado que, en lugar de negociar con Junqueras, "debería ir a Bruselas a conocer bien" lo que opinan sobre los presupuestos, después de que la UE advierta "por carta" al Gobierno de "lo falsos que, a priori, parecen" y de que "carecen de legitimidad de origen".

García-Egea se refiere así a la carta que, según García-Egea, Bruselas ha enviado al Gobierno tras haber examinado el borrador de presupuestos para 2019.

Fuentes del Ejecutivo afirman que Bruselas enviará efectivamente a España una carta en los próximos días sólo para pedir "aclaraciones técnicas" y que en ningún momento recogerá una advertencia de incumplimiento.

Según el secretario general del PP, Bruselas lanza una "dura advertencia" al Gobierno y le pide que vaya al Parlamento a negociar la senda de estabilidad en la que ha de basarse el proyecto de ley de Presupuestos.