PP CONVENCIÓN
Sarkozy pide un nuevo pacto para una Europa fuerte que elija a sus aliados
El expresidente francés Nicolás Sarkozy ha reclamado este miércoles desde Madrid, en la convención nacional del PP, un nuevo pacto para crear una Unión Europea fuerte, que solo cuente consigo misma y elija sus propios aliados, sin ser "vasallo" de nadie, ni de la Casa Blanca.
Publicado el - Actualizado
2 min lectura
El expresidente francés Nicolás Sarkozy ha reclamado este miércoles desde Madrid, en la convención nacional del PP, un nuevo pacto para crear una Unión Europea fuerte, que solo cuente consigo misma y elija sus propios aliados, sin ser "vasallo" de nadie, ni de la Casa Blanca.
Junto al líder del PP, Pablo Casado, Sarkozy ha advertido que o "Europa o refunda totalmente su funcionamiento o vamos a desaparecer del mapa" y ha pedido por ejemplo que las decisiones sobre las fronteras no las tome un comisario europeo, si no un órgano con los ministros de Interior de los socios comunitarios.
"Nuestros amigos americanos tan solo respetan a los fuertes yo soy amigo de Estados Unidos, pero un amigo de pie, no acostado". "Europa hoy, lo siento, es débil, no cuenta", ha argumentado además Sarkozy.
Y ha criticado la retirada de Afganistán. "No me gustó (...) yo mandé a soldados franceses para que los mataran y no es para asistir a esa renuncia, esta debacle".
También ha advertido el exmandatario fracés de que la crisis migratoria "no ha empezado" porque "lo que vendrá será mucho peor que lo que hemos conocido" y por eso creen que deben ser los políticos, y no los funcionarios, quienes tomen las decisiones.
Sarkozy, que ha abogado por un FMI europeo o ha considerado un escándalo el brexit, ha pedido una Europa independiente, que decida si habla con Rusia o con China. "Europeos, despertaros, somos fuertes", ha recalcado.
Y ha pedido ignorar los "sobresaltos diarios" y tomar decisiones, sin buscar antes el "consenso" que es a su juicio "una enfermedad", la enfermedad de Europa, porque "si esperas a que todo el mundo esté de acuerdo en tomar una decisión no tomarás una decisión".
Sarkozy, sobre el que pesa una pena de cárcel por corrupción y tráfico de influencias, ha dicho que jamás se arrepintió de hacer política, que no tiene ninguna cicatriz y que lo volvería a hacer.