Condenado a 25 años de cárcel por intentar matar a su mujer e hijo con un martillo en Dénia

El hombre, de nacionalidad británica, atacó a martillazos al hijo de su pareja mientras dormía e intentó asfixiar a su pareja

 Fachada de la Audiencia Provincial de Alicante

COPE.es

Tiempo de lectura: 2' Actualizado 07 mar 2024

Un británico de 73 años ha sido condenado a 25 años de cárcel por tratar de matar a martillazos a su esposa y al hijo de ella en el domicilio familiar de Dénia (Alicante), según la sentencia de la Sección Primera de la Audiencia Provincial facilitada a Efe.

La sentencia ha considerado culpable a R.U. de un delito de intento de asesinato del hijo de su esposa, de 20 años y fruto de una relación sentimental anterior, y del homicidio frustrado de la mujer, cuando ella acudió en defensa de su vástago. Los hechos ocurrieron el 16 de abril de 2017 cuando el ahora condenado acudió a la habitación del hijo de su mujer, en el domicilio familiar de Dénia en el que residían, y que le golpeó reiteradamente con un martillo mientras dormía, lo que le provocó varias fracturas en el cráneo.

Según el fallo, también golpeó a su esposa con la misma herramienta cuando trató de evitar que siguiese con la agresión, todo después de varios meses de discusiones y de conflictos en el ámbito familiar. Además de agredirla con el martillo a la mujer, le dio puñetazos en el estómago y trató de asfixiarla.

La fiscalía solicitaba para el acusado una pena total de 35 años de prisión como presunto autor de un delito de intento de asesinato, otro de intento de homicidio, un delito de malos tratos habituales, dos de maltrato en el ámbito de la violencia doméstica y tres de amenazas. Su defensa, por su parte, solicitaba su libre absolución tras alegar que no había cometido delito alguno puesto que en el momento en el que se produjeron los hechos se encontraba con sus facultades mentales anuladas de manera transitoria.

De hecho, el procesado declaró en el momento del juicio que no recordaba nada de lo sucedido. A la vista de los informes forenses y de los testimonios tanto del acusado como de las víctimas, el tribunal concluye que sí era plenamente consciente de sus actos y que, además, actuó con alevosía. Según la sentencia, los episodios de discusión entre el procesado, su esposa y el hijo de esta se habían repetido de forma reiterada durante los doce años de convivencia.