La autopsia determinará si el parricidio de Quintanar del Rey ocurrió el miércoles. Crónica Juan Baño

Los cuerpos de la agente de la Guardia Civil y de sus hijas de 9 y 11 años a las que mataba con su arma reglamentaria en la vivienda que ocupaban del acuartelamiento de Quintanar del Rey han sido trasladados al Ayuntamiento de esta localidad conquense tras practicarles la autopsia en el Instituto Anatómico Forense de Cuenca.

El examen forense determinará si las muertes se produjeron el miércoles por la noche, pese a que ayer se informaba que los agentes que acudieron a la casa al ver que su compañera no se presentaba al turno habían oido varias detonaciones.

Es un dato que seguramente despeje la autopsia. Lo que también confirman a COPE fuentes del Instituto Armado es la intención que había manifestado la madre, Paola, de pedir destino en Algeciras, a donde serán trasladados sus restos mortales ya que era natural de esta ciudad. Precisamente el cambio de destino fue el que alimentó la controversia con la familia paterna, que se oponía al traslado de las niñas, y con su exmarido, albañil en Quintanar, del que se había separado hace más de un año.