¿Por qué es peligroso comprar las frutas cortadas por la mitad?

Son más cómodas y económicas, pero a la hora de elegir la fruta en mitades hay que tener algunos requisitos muy en cuenta para no correr riesgos

¿Por qué es peligroso comprar las frutas cortadas a la mitad?

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Su frescura y alto contenido en agua hace que las frutas se encuentren entre los alimentos preferidos del verano, sobre todo aquellas especialmente jugosas como la sandía o el melón, aunque quizás su elevado precio por estas fechas haga que no recurramos a ellas todo lo que quisiéramos.

TE PUEDE INTERESAR: El motivo por el que el precio de la sandía se ha disparado y qué hacer para ahorrar

Bien por el precio o por comodidad, son muchas las personas que optan por comprar las frutas envasadas en trozos o por mitades y cuartos, sobre todo si se trata de melón, papaya, piña o sandía, dado su considerable tamaño que pasa a ser una opción para quien considere que una entera es demasido grande. Pero, ¿corremos algún riesgo si la consumimos de esta manera?

El tema no es menor, en 2018 Estados Unidos sufrió un brote de salmonela que afectó a decenas de personas a raíz de varios melones y sandías cortados. En 2019 otro brote hizo enfermar por la misma razón a casi cien personas.

TEMPERATURA

En principio y a diferencia de las frutas troceadas, los medios de sandía o melón no suelen estar en las zonas refrigeradas de los supermercados, sino a temperatura ambiente, generalmente en las baldas o cajas de fruta junto con otros ejemplares enteros.

RIESGO DE CONTAMINACIÓN

El problema, tal y como advierte la OCU es que la fruta una vez cortada puede presentar un mayor riesgo de contaminación debido a una posible mala higiene del cuchillo o de la tabla de cortar. Además la pulpa de la fruta, protegida por la piel, queda expuesta a los agentes externos.

La fruta en mitades recuerdan, tiene una menor vida útil por lo que al mantenerla así hay más riesgo de crecimiento de microrganismos patógenos como Salmonella, Escherichia coli verotoxigénico o Listeria monocytogenes.

Entre los síntomas más comunes que provocan estos microorganismos se encuentran la diarrea, vómitos, náuseas y dolor abdominal, también enfermedades más graves, en personas más vulnerables.

OJO A LAS FRUTAS MÁS ÁCIDAS

Avisan también de que cuanto más ácidas sean las frutas y más maduras estén, mayor será el riesgo de contaminación. De entre la sandía, melón, piña y papaya analizadas en un estudio de AESAN, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutriciónes, la piña es la que presenta mayor riesgo de deterioro, al ser más ácida.

La fruta en mitades en el punto de venta, recuerdan "puede permanecer hasta 3 horas a temperatura ambiente sin que eso implique un riesgo microbiológico significativo, así sí, "siempre que la temperatura ambiente no supere los 25º C, que el lugar esté ventilado y protegido de la luz solar y que tras la compra, la fruta se refrigere de forma inmediata (a menos de 5º C)".

PREVENIR ES CURAR

Ante todo los comercios deben extremar la higiene de los utensilios y superficies de corte, así como mantener la fruta alejada del calor, la luz solar y buscar una temperatura adecuada. Y sobre todo descartar para el corte las frutas muy maduras.

Nosotros también debemos evitar añadir una mitad la carro las piezas más maduras, introducirlas en la nevera según lleguemos a casa, mantenerlas protegidas con film transparente o en un tupper y limpiar siempre bien los cuchillos y las tablas de corte que usemos para manipularla.