Alexandra Duchateau, es belga, sabe 6 idiomas y le cuesta encontrar trabajo, ha pasado de ser animadora en un hotel, recepcionista a friegaplatos. Es madre con dos hijos, uno de 21 años que está en Inglaterra, y otro de 12 años vive con ella. Ambos residen en una casa de campo con otras cuatro madre y siete niños.

Alexandra ha llegado a esta situación después de haber vivido hasta en una tienda de campaña y haber tenido amenazas de un individuo que le alquiló un piso que encima no era suyo. Este es uno de tantos casos que rozan el ridículo. En Ibiza el negocio turístico está provocando que muchas familias abandonen la isla al no poder acceder a una vivienda digna.

La presidenta de Baleares ha pedido al Gobierno central que reforme la Ley estatal de Arrendamientos Urbanos

La situación afecta a los propios residentes desde policías, guardias civiles, funcionarios, médicos, dependientes, profesores o los propios trabajadores de temporada. Ninguno quiere ser destinado a la isla. La mayoría de los pequeños empresarios ven dificultades en encontrar trabajadores que atiendan sus negocios. Hay hoteles que han decidido facilitar a sus empleados el alojamiento ante el riesgo de que se marchen. Hasta el Gobierno balear ha tenido que habilitar un edificio abandonado, el antiguo hospital, para poder alojar al personal sanitario.

La presidenta de Baleares, Francina Armengol, ha pedido al Gobierno de Mariano Rajoy que lleve a cabo una reforma de la Ley estatal de Arrendamientos Urbanos para que se especifique que los alquileres turísticos de viviendas han de ser por menos de 30 días y así poder resolver el problema que se plantea en aquellas comunidades con mayor peso turístico.

En Ibiza la situación es extrema, se alquilan camas o balcones por 500 euros ni habitaciones por más de 1.000, hay fianzas de pisos de dos habitaciones que superan los 20 mil euros, o incluso se ha sabido de un garaje donde viven 14 personas.

"Todo el mundo ha querido subirse al tren, hay una página 'Ibiza afectados por los alquileres' que va a Hacienda, pero tiene mucho retraso y no pueden con todo" cuenta Alexandra en 'La Tarde' y se lamenta de lo que está pasando, "hace falta policía, seguridad, sanidad, profesores, hay tres policías en un pueblo donde tenía que haber 15. Si vas a urgencias hay de 8 a 12 horas de espera".

De paraíso a un lugar inhabitable, "he intentado irme dos veces, estuve año y medio en Italia y he vuelto, mis hijos se han criado aquí los dos, mi hijo pequeño quiere estar en Ibiza pero le estoy planteando que aquí no podemos seguir".