Los 4,8 millones de habitantes de Suecia deben «adquirir competencias» para la guerra y por eso el gobierno sueco ha editado un folleto de instrucción en el que, por primera vez en más de 30 años, se prepara a la población para soportar un conflicto. El documento, titulado "Om krisen eller kriget kommer" (Si la crisis o la guerra llegan), ha sido elaborado por la Agencia Sueca de Contingencias Civiles (MSB) y da instrucciones precisas sobre qué hacer si Suecia es atacada. Las guerras de hoy en día, eso sí, son muy diferentes a la última vivida por Europa, la II Guerra Mundial, de modo que hoy las principales preocupaciones de los expertos en seguridad parecen ser, según los autores del documento, la dificultad para identificar noticias falsas o para adaptarse a condiciones extremas del clima.

En la actualización de las instrucciones a la población civil, cuya última edición había sido publicada en los años 80, se contemplan también situaciones como ataques terroristas o conflictos armados, además de grandes traslados de población o llegada masiva de refugiados. El panfleto, de 20 páginas y que incluye indicaciones como la ubicación de los búnkers y otros espacios de protección como "túneles y sótanos". También contiene un apartado dirigido directamente a combatir la propaganda y las informaciones falsas en un contexto pre electoral. Sea cual sea la forma que tome la amenaza, se insta a los suecos a plantar resistencia al atacante. "Todos tenemos la responsabilidad de la seguridad y de la preparación de nuestro país, por eso es importante para todos tener conocimiento sobre cómo podemos contribuir si algo serio ocurre", ha justificado además en un comunicado Dan Eliasson, el director de MSB.

Los medios suecos han identificado al supuesto enemigo como la nueva amenaza rusa, aunque Christina Andersson, responsable de la campaña de sensibilización, asegura que "se trata de unas instrucciones genéricas que todos los civiles deben conocer por su propia seguridad" y no destinadas a hacer frente a un enemigo concreto. La MSB describe la situación de seguridad general como "inestable" e "impredecible", por lo que justifica que el gobierno tenga la voluntad de informar a sus ciudadanos en "situaciones de emergencia, crisis del tiempo de paz y en el extremo de la guerra".

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