Lo ha sufrido una mujer de 36 años, vecina de Palma de Mallorca, que acudió al hospital Universitario de Son Espases obnubilada, confusa, con discurso incoherente, pupilas muy dilatadas, visión borrosa e inestabilidad de la marcha. Los análisis de orina, practicados a la paciente, no dieron positivo en ninguna droga y la amiga que la acompañó al hospital aseguró que creían que el exmarido, con quien se encontraba en trámites de divorcio, la podría estar envenenando. Este dato llevó a practicar un análisis del cabello y ahí se encontraron los restos de escopolamina, conocida como burundanga. El exmarido reconoció que la droga la había comprado en internet y se la había suministrado disuelto en una bebidas con el fin de hacerle daño. El doctor, Santiago Nogué es jefe de toxicología clínica del Hospital Clínic de Barcelona que nos ha aclarado por qué esta droga no se detecta  en la orina, "se puede detectar en orina, pero el periodo para demostrar esa presencia es corto, horas, escasas 6 horas por ello la única forma de encontrarla es en el cabello". De hecho, explica el doctor Nogué ,"en Barcelona con mas de 500 análisis no lo hemos localizado, hay muchos mitos alrededor de esta sustancia". Entre esos mitos es como se transmite, " no es por un beso, ni por inhalación, ni por dar la mano, la única manera es porque te la administren por via muscular, subcutánea o que la introduzcan en una bebida sin que se altere el sabor y a partir de ahí se produce la intoxicación".Burundanga, la droga que anula la voluntad