Borja Sémper asistía en la tarde del domingo en Andoain a un acto para contrarrestar el homenaje que el entorno proetarra había preparado para recibir a Iñaki Igelartegi e Ignacio Otaño, dos miembros del comando IP de ETA que facilitaron información sobre Joseba Pagazaurtundúa. El jefe de la Policía Local de Andoain fue asesinado el 8 de febrero de 2003 en el bar donde solía desayunar. “Fuimos con un grupo de chavales, de Nuevas Generaciones, muy corajudos porque -añade- no podíamos tolerar que se les reciba así en la calle. Sólo merecen el repudio y la vergüenza. No un homenaje”.

El portavoz parlamentario del PP vasco recuerda que la escena “tenía un punto de dejavou” porque era la misma imagen que tantas veces se ha visto en el País Vasco con los homenajes a decenas de etarras que tras pagar su condena en prisión volvían a sus lugares de origen o residencia en medio de los vítores de su entorno. Sémper asegura que “lo peor de la sociedad vasca estaba allí representado” y se niega a aceptar que la situación sea la misma aunque se parezca: “las cosas se han transformado, antes mataban, ahora gritan. Antes se chivaban (…). Es cierto que sólo éramos seis, pero les hemos ganado”.

Recuerda Borja Sémper que una parte del pasado de la banda terrorista ETA ya se ha superado, pero “ahora hay que enfrentarse a la segunda etapa, la de las consecuencias de las pistolas y la sangre”. Razón por la que añade que “el gran reto es ser capaces de llamar la atención sobre algo que es inaceptable”; sobre todo incide en la necesidad de explicar a los niños, a las generaciones más jóvenes que a los terroristas no se les puede recibir con un homenaje. Una vez que ETA ha dejado de matar, los demócratas -comenta el político vasco- “podemos aceptar que salgan a la calle, pero no nos pueden pedir que toleremos el regodeo”.

La fiscalía va a investigar el homenaje en Andoain y Borja Sémper se congratula de vivir “en un país muy garantista en cuanto a las expresiones de cada uno. Los tribunales se cuidan muy mucho de censurar una actuación política, pero (…) lo que ví ayer fue un acto de enaltecimiento del terrorismo”. En su intervención en 'La Linterna' el político vasco ha defendido la necesidad de hacer una reflexión “para cerrar bien la etapa de ETA, dándonos cuenta de que ha habido vencedores y vencidos. Ha habido buenos y malos y eso tiene que tener un reflejo social”.

La presidenta del PNV de Vizcaya Itxaso Atutxa y el secretario general de Sortu Arkaitz Rodríguez han criticado a los miembros del PP vasco por exhibir fotografías de Pagazaurtundúa en el homenaje a los dos presos de ETA excarcelados. Aseguran que buscaban “sacar réditos políticos”; ante estas acusaciones Sémper concluye que se siente dolido porque “me ha llegado a decir que soy un oportunista. Se lo hubiera cedido gustosamente, también le hubiera cedido mis escoltas, la vida que me han hecho vivir a mí y a mis compañeros”. Y se queja de que Atutxa no “haya hecho nunca nada para mostrarse firme contra ETA”.