Sigue subiendo la cifra de abulenses que apoya la labor social, evangélica y caritativa de la Iglesia a través de la X de la declaración de la Renta. En el pasado ejercicio, Ávila registró 37,336 declaraciones a favor de la Iglesia.
Un ejercicio libre y voluntario de cada contribuyente como señalaba Alejandro Jiménez, ecónomo diocesano. Jiménez ha señalado también que el montante total que recibe la diócesis (más de 1,9 millones de euros) es tan sólo un 20 % de lo que ahorra al Estado, por ejemplo, en el ámbito educativo.
Y es que los casi 6000 alumnos que estudian en centros concertados de nuestra provincia suponen un ahorro de 9,6 millones de euros a las arcas públicas, teniendo en cuenta que, mientras una plaza de un centro público tiene un coste de 3500 euros, la misma plaza en un centro concertado cuesta solamente 1850 euros. Por su parte el Obispo de Ávila ha hecho un llamamiento a todos, creyentes y no creyentes, a apoyar mediante este gesto de la declaración de la Renta la ingente labor de la Iglesia.