Este hecho provocará que muchos clientes de esta zona y de otras próximas se vean obligados a operar en la sucursal más cercana, que  en este caso  es la del Banco Pastor-Viveiro, con las consiguientes molestias, sobre todo para aquellos vecinos de edad más avanzada y que tienen una mayor dificultad para desplazarse hasta la oficina de Viveiro. El anuncio del cierre de esta oficina en Covas, tendría una  repercusión vecinal menor si  en esta parroquia existiesen otras sucursales bancarias, lo que por el momento no es el caso, por lo que su traslado va ocasionar  molestias a muchos clientes, en especial como he apuntado anteriormente a aquellas personas mayores, así como a los pequeños y medianos empresarios del sector de la hostelería , comercio, peluquerías, etc, de gran importancia en esta parroquia. El  Banco Pastor lleva desde el año 1981 o sea 33  años en el nº 3 de la Calle Suasbarras  en Covas, con aproximadamente  unos mil clientes, incluyendo también una amplia  zona comercial de esta parroquia que en la actualidad tiene un  censo aproximado de 4000 vecinos, el cual se multiplica en el verano. Pero estos datos  poco parecen importar al Banco Pastor y al poderoso Grupo del Banco Popular a la vista de la decisión adoptada.