La tensión en el albergue de migrantes de Mérida en las últimas horas ha provado que se tomen medidas drásticas. Varios altercados y discusiones han requerido la intervención de los vigilantes de seguridad y se ha procedido a la expulsión de tres personas.

Según nos confirman, estos incidentes han sido motivados en gran medida por dificultades con el idioma, así como por la escasez de recursos básicos como ropa y comida. Estos problemas han generado un ambiente de tensión entre los propios residentes del albergue.

De los tres individuos que han sido expulsados en las últimas horas, dos han sido trasladados a Almería, mientras que el tercero ha sido enviado a Huesca en un intento de mitigar la situación y evitar futuros conflictos.