La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal dedicada al tráfico internacional de vehículos que blanqueaba los beneficios a través de criptomonedas. Hay un total de 21 personas detenidas y se han intervenido 64 vehículos valorados en más de cuatro millones de euros.

Esta organización robaba coches de alta gama en España y Suecia, para después venderlos en Mauritania y Rumanía. Posteriormente, los detenidos blanqueaban el dinero a través de criptomonedas haciendo grandes envíos de dinero a empresas de cambio y envío divisas a terceros países.

La investigación comenzó en 2022, cuando se recibieron varias denuncias en Las Rozas por el robo de vehículos de alta gama con características similares. En todos los casos de coches de gran cilindrada y con sistemas antirrobo sofisticados y complejos. Sin embargo, desde 2019 ya se tenía conocimiento de la actividad de dicha organización. A través de la 'Operación Vallota' los agentes han desmantelado esta banda.

Para la sustracción de los coches siempre seguían el mismo modus operandi: tras elegir el que iban a robar, le colocaban un dispositivo de seguimiento para saber su ubicación exacta y en el momento en que estaba estacionado, valiéndose de tecnología avanzada relativa a la anulación de sistemas de seguridad y de apertura y arranque, conseguían en menos de un minuto hacerse con el vehículo. Tras cambiarles la matrícula y la documentación en España, los trasladaban a Francia y finalmente Mauritania o Rumanía.

Durante la operación se han realizado cinco entradas y registros en Madrid capital y Villaviciosa de Odón y otras tres localidades en Toledo (Yeles, Magán y Seseña), donde los agentes localizaron multitud de dispositivos electrónicos dedicados a la anulación de sistemas de seguridad que superan los 700.000 euros y, además, en el domicilio del líder de la organización, encontraron un rifle, dos armas cortas de fogueo que estaban modificadas para usar munición real y una pistola táser.

En total se ha detenido a 18 hombres y 3 mujeres de distintas nacionalidades por los presuntos delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico ilícito internacional de vehículos, blanqueo de capitales, estafa, falsedad documental, tenencia ilícita de armas, delito de daños, usurpación de identidad y receptación.

La operación ha sido llevada a cabo por agentes del Sector de Tráfico de Madrid con la colaboración la Comandancia de Madrid, coordinada por EUROPOL, y han colaborado activamente la Policía de Rumanía, la Agregaduría de Interior en Rumanía, la Gendarmería Nacional Francesa y la Agregaduría de Interior en Francia.