La historia de Torres Padilla, cofundador de las Hermanas de la Cruz de Sevilla que será beato

El Papa Francisco ha aprobado el milagro de este sacerdote canario con fama de santidad en la Sevilla de finales del siglo XIX

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El Papa Francisco ha aprobado el milagro que llevará a los altares a José Torres Padilla, sacerdote y teólogo que fue cofundador en Sevilla de la congregación de las Hermanas de la Cruz, junto a Sor Ángela de la Cruz.

Torres Padilla nació en San Sebastián de la Gomera (Islas Canarias) en 1811, aunque buena parte de su vida transcurrió en Sevilla, donde falleció en 1878. Su infancia fue extremadamente dura, ya que sus padres fallecieron el mismo día cuando tan solo tenía cuatro años de edad, después de que la enfermedad de su padre afectara sobremanera a su mujer.

Además, el sacerdote canario sobrevivió de manera milagrosa a una caís en el pozo de la escuela en la que estudiaba, tratando de imitar a los chicos mayores que saltaban por encima.

A los 16 años, se trasladó a Tenerife para estudiar Filosofía. Al cerrarse la Universidad en 1833 se trasladó a Sevilla para continuar con sus estudios, aunque sus planes cambiaron después de que la capital hispalense estuviese afectada por el cólera, por lo que se marchó a Valencia. Un año más tarde, cuando la epidemia fue mitigada, llegó a Sevilla.



José Torres Padilla, director espiritual de Sor Ángela de la Cruz

En la capital andaluza José Torres Padilla adquirió fama de santidad y se le llamaba popularmente el 'Santero' por ser director espiritual y confesor de varias monjas de especiales virtudes, entre ellas a Sor Ángela de la Cruz, con quien fundó el Instituto de las Hermanas de la Cruz y que fue canonizada por Juan Pablo II en 2003 con el nombre de Santa Ángela de la Cruz.

Fue catedrático de Teología en el Seminario Conciliar de Sevilla, canónigo de la Catedral de Sevilla y asistió como teólogo al Concilio Vaticano I, por sugerencia del Papa Pío IX.

Es en Sevilla el lugar donde descansa su cuerpo desde el 23 de abril de 1878. El 24 de abril de ese año fue conducido al panteón de San Sebastián, y el 25 fue enterrado.

A los cinco años de su entierro, Sor Ángela de la Cruz pidió y consiguió el traslado de sus restos para depositarlos en la Casa Matriz en el n.º 12 de la calle Cervantes de Sevilla. El traslado se hizo el 30 de abril de 1883 y sus detalles constan en el acta de exhumación que Sor Ángela de la Cruz hizo levantar al notario Antonio Abril y que figura en el número 146 de su protocolo.

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