Las conclusiones de los empresarios tras el encuentro en Santiago: "Somos personas, no individuos"

La IA o la necesidad de tejer vínculos en un mundo dominado por el individualismo, aspectos abordados en el II Encuentro de Empresarios organizado por la archidiócesis de Santiago

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La necesidad de tejer alianzas, establecer vínculos o recibir un trato como persona y no como individuo, son algunos de los puntos que se han abordado en elII Encuentro de Empresarios celebrado en Santiago de Compostela entre los días 11 y 12 de abril.

El ecónomo de la archidiócesis de Santiago, Fernando Barros, ha explicado en 'ECCLESIA al día' que el objetivo de estos encuentros es hacer reflexionar a los empresarios “sobre aspectos de la Doctrina Social de la Iglesia, como la dignidad de la personas”, siendo uno de los mensajes que más ha calado entre los presentes.

“Perseguimos no solo lanzar ideas y reflexionar, sino que se actúe. Aunque no hay declaración como tal, sí hay un conjunto de mensajes y reflexiones que pretendemos que esto se consolide y se actúe”, ha señalado.


Barros ha precisado que algunas de las ideas que se han abordado en esta segunda edición del encuentro empresarial en la capital gallega, destacan el valor de la empresa como factor de cohesión social o la importancia de la Inteligencia Artificial: “Un aspecto muy relevante es la alianza y el vínculo en un mundo donde el individualismo es el que tiene preferencia”, ha advertido el ecónomo.

Luis Argüello: "Somos personas, no individuos"

En su intervención en el congreso, el presidente de la Conferencia Episcopal Española reclamaba establecer alianzas y vínculos en un mundo donde “el individualismo y el poder tienen preferencias”.

Luis Argüello ha hecho hincapié en que para la Iglesia, lo que fundamenta una propuesta ética es “descubrir que estamos vinculados, que somos personas, no individuos, que existe un misterio que nos abraza y nos vincula”.

El también arzobispo de Valladolid ha recaldado que, más allá de las religiones, todos estamos vinculados a través de la “historia que compartimos, con la tierra que pisamos, con los que han de venir después de nosotros”, y considera que ese vínculo es posible reconocerlo “porque hay un misterio acogedor al que llamamos Padre”.



A juicio del presidente del episcopado, “la fraternidad es un hecho real, una fuente de vínculos que nos permite sellar alianzas, desde la matrimonial a la alianza empresarial”. En este sentido, Argüello, argumenta que “una empresa no deja de ser un ámbito donde se generan alianzas, las alianzas internas entre los que trabajan en ella y las alianzas entre empresas, instituciones políticas y la sociedad en la que se está. Desde el deseo de que la alianza permita el protagonismo de todos, empresarios y trabajadores, los que producen y demandan lo producido”, ha expresado.

Antonio Garamendi: "Poner en el centro de la actividad empresarial a las personas"

Por su parte el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha hecho hincapié en su discurso que sin buenos empresarios “no hay buena economía”, y enfatiza que “la generación de riqueza por parte de los empresarios no solo se traduce en los legitimos beneficios, sino que también genera puestos de trabajo, sueldos, inversiones e impuestos qnue en última instancia son los recursos que sostienen los servicios del Estado para todos los ciudadanos”, ha subrayado.


Asimismo, Garamendi ha defendido que la ética empresarial implica valores como poner en el centro de la actividad empresarial a las personas “con sus necesidades y anhelos” para contribuir a que “la economía avance y este desarrollo alcance a todas las personas”.

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