Las claves del viaje del papa Francisco a Ginebra

Este jueves para participar en el 70 aniversario del Consejo Ecuménico de las Iglesias

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1. Viaje de gran trascendencia ecuménica:

Será la segunda gran cita ecuménico del pontificado del Papa Francisco después de la visita a Lund, en Suecia, en octubre de 2016 para conmemorar del 500 aniversario de la reforma de Lutero.

El Consejo Mundial de las Iglesias espera al Papa con gratitud en una visita que consideran un signo de esperanza para todos los que trabajan por la paz y la unidad.

Se trata en realidad de una peregrinación apostólica para participar en el setenta aniversario del Consejo Ecuménico de las Iglesias (World Council of Churches, WCC), una organización a la que la Iglesia católica no pertenece como miembro, pero que engloba a 349 Iglesias protestantes, luteranas, anglicanas y ortodoxas de más de 110 países.

Es el 23 viaje internacional del Papa, que ya ha visitado 34 países.

El cardenal Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos, ha afirmado que la visita de Francisco es «un reconocimiento a la contribución única del Consejo Mundial de las Iglesias al movimiento ecuménico moderno», nacido en las iglesias protestantes y al que se sumaría después Roma. Las relaciones con Roma se iniciaron durante la preparación del Concilio Vaticano II, que selló el compromiso de la Iglesia católica con el movimiento ecuménico.

Desde hace más de cincuenta años existe una colaboración fructífera en los terrenos del diálogo doctrinal, la misión, la justicia, la paz, los jóvenes y los nuevos desafíos en la vida de las sociedades moderna.

2. Francisco es el tercer Papa que visita Ginebra

En 1969 Pablo VI viajó para visitar la Organización Mundial del Trabajo, por sus cincuenta años; Juan Pablo II viajó a Ginebra cuatro veces (en 1982, 1984, 1985 y 2004).

En el primer viaje de una Papa a este país, Pablo VI visito también el Centro del Consejo Mundial de las Iglesias. El Papa Wojtyla es el único Pontífice que ha realizado un viaje de varios días a Suiza en 1984.

El último viaje de un Papa a Suiza fue en 2004, cuando Juan Pablo II visitó Berna, poco menos de un año antes de morir. En esa ocasión celebró una misa para 70 mil personas en Allmend, en el ámbito de un encuentro nacional de jóvenes católicos.

3. Francisco no visitará ninguna de las agencias internacionales que tienen sede en Ginebra.

El Papa acude a Ginebra con un motivo muy claro: fomentar la unidad entre los cristianos. Podría haber aprovechado el viaje para visitar alguna de las importantes organizaciones

dependientes de la ONU como la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), La Organización Internacional del Trabajo (OIT), La Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

Se trata por lo tanto de un viaje esencialmente ecuménico, en agradecimiento por el servicio desarrollado por el CMI en favor de la unión de las Iglesias

4. El Papa permanecerá 10 horas en el país con una intensa agenda.

A las 8.30 de la mañana parte del aeropuerto romano de Fiumicino y llegará a Ginebra a las 10.10 de la mañana. Después de la ceremonia de bienvenida y del encuentro privado con el presidente de la Confederación Helvética, Alain Berset, en el aeropuerto, el Papa participará en el primero de los dos encuentros interconfesionales, una oración en la capilla ecuménica de la sede del CMI.

En la primera oración-encuentro confesional, el Papa estará acompañado por el secretario general del Consejo de las Iglesias, Olav Fykse Tveit, que es luterano, una teóloga anglicana de Kenya que actuará como moderadora, Agnes Aubom, y dos vicemoderadores, el metropolita Gennadios de Sásima del Patriarcado ecuménico de Constantinopla, y la obispa metodista estadounidense Mary Ann Swenson.

Después, Francisco se dirigirá al instituto ecuménico de Bossey, a 25 kilómetros de Ginebra junto al cardenal Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los cristianos. Tras el habitual intercambio de regalos y un primer encuentro con un grupo de estudiantes, llegará el momento del almuerzo.

En el segundo encuentro ecuménico, el Papa Francisco pronunciará el único discurso del viaje y el de más peso de la jornada. Al comenzar el encuentro, Francisco saludará a ocho coreanos, cuatro del norte y cuatro del sur, para reconocer el proceso de la paz en el que están comprometidos sus respectivos países. El viaje concluirá con la misa para la comunidad católica en el Palexpo de Ginebra, que tiene una capacidad para 40 mil personas (los que no puedan entrar podrán seguir la Misa en pantallas instaladas en el exterior de la estructura). A las 19.45, el Papa se despedirá de Suiza y a las 20 partirá el avión hacia el aeropuerto romano de Ciampino.

5. La Guardia Suiza especialmente presente el viaje        

No podría faltar una representación especial de la Guardia Suiza en el viaje del Papa a su país de origen. Por ese motivo, dentro del avión papal viajará el comandante de la Guardia Suiza, Christoph Graf. Además, dos ex miembros de la Guardia Suiza recibirán a Francisco en tierra helvética.

Fue bajo el pontificado del Papa Julio II cuando se instauró oficialmente a la Guardia Suiza como cuerpo militar encargado de la seguridad de la Ciudad del Vaticano. Para ser miembro de esta institución hay que cumplir unos requisitos específicos, como estar soltero, tener nacionalidad suiza, profesar la religión católica y medir un mínimo de 174 centímetros.

6. El Patriarca ortodoxo Bartolomé también estará presente en los actos centrales del viaje.

Desde hace tiempo el Papa Francisco y Bartolomé I trabajan juntos en pro de la unidad entre los cristianos. Los sucesores de Pedro y Andrés comparten un profundo sentido ecuménico en el que la unidad de las Iglesias Ortodoxas juega un papel primordial.

Bartolomé I se encuentra ya en Ginebra, participando en los actos oficiales por el 70° aniversario del Consejo Mundial de Iglesias, donde ha instado a persistir en los esfuerzos por la unidad, la justicia y la paz: “Celebramos una larga peregrinación común en el sendero de la unidad, del testimonio cristiano, del compromiso a favor de la justica, la paz y la salvaguarda de la Creación”

El Patriarcado Ecuménico de Constantinopla fue uno de los miembros fundadores del CMI. Estableció su sede en Ginebra, en 1948, para fomentar la unidad de los cristianos.

En la actualidad, reúne a 350 iglesias protestantes, ortodoxas y anglicanas, entre otras, que representan a más de 550 millones de cristianos de más 120 países.

En febrero del 2016, el inédito abrazo entre el papa y el patriarca ortodoxo ruso Kirill en Cuba supuso otro gesto importante a favor de la unidad de los cristianos por parte de los líderes de las dos iglesias cristianas más grandes y divididas desde el cisma del año 1054.

A partir del Concilio Vaticano II, ha sido mucho el camino andado en la busca de la unidad por todos deseada, recogida por el Papa Juan Pablo II en su carta encíclica “Ut Unum Sint”, en mayo de 1995. En todo este tiempo la Iglesia no ha dejado de rezar y de trabajar por la unidad perdida.

6. En todos los viajes el Papa quiere encontrarse con la comunidad católica

Cada viaje papal incluye siempre un encuentro con la comunidad católica. Francisco celebrará la Santa Misa en el mismo Palacio de Exposiciones de Ginebra con católicos de toda Suiza que ya han agotado las 41.000 entradas disponibles.

Aunque Suiza es un país tradicionalmente protestante, la fuerte tasa de inmigración ha hecho que la proporción de católicos ascienda de forma constante en las últimas décadas, con cerca del 35 % de la población que se declara católica actualmente. En total, unos 2,5 millones de católicos.

El patrón del país es San Nicolás de Flüe, también conocido como el Hermano Klaus. Consiguió evitar la guerra civil en 1478.

7.Temas que se abordarán durante la Peregrinación Ecuménica:

No faltará, por supuesto, la persecución de los cristianos en tantos países del mundo y la violencia en Siria y Medio Oriente.

El cardenal Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo para la promoción de la unidad de los cristianos, que acompaña al Papa en el viaje, ha asegurado que abordarán asuntos relacionados con la justicia, de asistencia humanitaria y la caridad fraterna.

Otro de los temas centrales será la paz y el apoyo de las Iglesias a los refugiados. De hecho, entre las 348 iglesias miembros del CMI, la mayor parte representa realidades africanas o asiáticas de donde proceden muchos refugiados que huyen hacia Europa.

El lema de la visita resume la idea central del encuentro: caminar juntos, rezar juntos y trabajar juntos. Es la filosofía del Papa Francisco. Es decir, que las diferencias teológicas entre cristianos no impidan trabajar juntos por las buenas causas.

El Papa ha dibujado una vez más un viaje abierto al diálogo, que ha de ser el sostén sobre el que se fundamente la verdadera paz.

8. Especial y significativa reunión entre coreanos del Norte y del Sur.

Una delegación de cristianos de las dos Coreas se encuentra ya en Ginebra. En total son 15 personas, invitados por el Comité Central del CMI, que lleva años trabajando para fomentar el diálogo y la paz entre la RPDC (Corea del Norte) y la República de Corea (Corea del Sur).

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