El Ayuntamiento de A Coruña pide a los vecinos que no bajen la basura por la huelga en la planta de reciclaje

El paro indefinido en Nostián ha comenzado anoche

Noela Bao

Tiempo de lectura: 2' Actualizado 11:11

Primera jornada de huelga en la planta de basura de Nostián, que deja el tratamiento de residuos reducido a la mitad en A Coruña y la comarca. Solo funcionan los servicios mínimos, según fuentes del comité de empresa. El paro ha comenzado a las diez de la noche, sin incidencias destacables. Todavía no se nota la protesta en los contenedores, pero la previsión es que acabe repercutiendo, porque la protesta será indefinida. De ahí que el ayuntamiento de A Coruña haya pedido la colaboración ciudadana ante el paro.

En un comunicado oficial, el consistorio ha solicitado a los vecinos que retengan en sus casas lo máximo posible las bolsas de basura. En caso de tener que depositar restos orgánicos en los contenedores, piden que lo hagan en una bolsa cerrada de forma “perfectamente” hermética para evitar olores. Y, sobre todo, para impedir que las gaviotas, los gatos y las ratas accedan a su contenido y lo esparzan por la vía pública.

También piden a la ciudadanía que no deposite cartón ni papel en las aceras cuando el contenedor esté lleno, porque puede atascar los sumideros en estos días de lluvia. Y demanda que se espere al final de la huelga para llevar residuos voluminosos como colchones, juguetes o mobiliario al punto limpio. Este servicio también está afectado por la huelga.

El Concello asegura que está utilizando “todos los mecanismos jurídicos a nuestro alcance” para una “rápida resolución” de un problema que califican de “complejo y desafortunado” y que entienden que “de ninguna forma es atribuible a la gestión del actual gobierno municipal ni a los trabajadores que legítimamente se movilizan”

JORNADA SIN INCIDENCIAS

Trabajadores concentrados a la entrada del complejo han informado en las últimas horas a los distintos camiones sobre los motivos de la huelga. Lo principal es el despido durante dos años de casi 40 trabajadores a partir del uno de enero. Los vehículos entraron en las instalaciones en convoy, acompañados por la policía local. La concesionaria Albada denunció un presunto sabotaje en la planta, entre el viernes y el sábado, que habría ya paralizado la actividad. El comité se desvincula completamente de estos hechos.

La plantilla sigue demandando al ayuntamiento el rescate de la concesión y denuncian que Albada dejó plantadas a las partes ayer en María Pita, en una reunión convocada por el Consello Galego de Relacións Laborais.