El Principado suspende la concesión de licencias para nuevos locales de juego durante 8 meses
Pretende frenar la apertura de salas de apuestas después que en el primer trimestre se presentaran 47 solicitudes, más que locales hay ya abiertos
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El Gobierno de Asturias ha decidido suspender, por un período de ocho meses, las autorizaciones para la apertura de nuevos establecimientos de juego en el Principado, hasta que se definan los nuevos criterios por los que se regirán la concesión de las licencias.
El Ejecutivo ha analizado en los últimos meses diferentes medidas para garantizar un crecimiento ordenado del sector, con el fin de dar continuidad a otras acciones de supervisión y control que han permitido contar actualmente con una oferta ordenada en la comunidad. Aunque la dimensión actual del sector se mantiene en términos razonables, en el primer trimestre de este año se han recibido en el Servicio de Juego de la Dirección General de Interior 47 consultas de viabilidad, frente a una media anual de cinco expedientes. Este hecho demuestra un creciente interés por parte de las empresas operadoras para instalarse en el Principado.
Por esta razón, la Administración autonómica iniciará ahora la elaboración de los criterios de ordenación que regirán la concesión de nuevas autorizaciones y que serán analizados por el Consejo de Juego. Así, en el seno de este órgano de asesoramiento y consulta se valorará la posibilidad de establecer limitaciones territoriales o numéricas al número de establecimientos de juego en el Principado y se sopesarán las diferentes opciones, tras evaluar las repercusiones económicas, sociales y de empleo.
La moratoria no afectará a los expedientes en los que quede acreditado que la solicitud de licencia de obra o actividad es anterior al acuerdo adoptado hoy por el Consejo de Gobierno.
Con esta decisión, el Principado será la tercera comunidad autónoma, después de Cataluña y Murcia, en establecer limitaciones a la oferta de establecimientos de juego y apuestas, conjugando el respeto a la actividad empresarial con el desarrollo de políticas de juego responsable que combinen acciones preventivas, de sensibilización, de intervención y de control.