Identifican instrucciones genéticas clave para la formación del esbozo ocular

Varios grupos de investigadores han identificado las instrucciones genéticas clave para la construcción del esbozo ocular, lo que otorga información genética para posibles terapias ante cegueras hereditarias progresivas y para buscar genes que puedan ser causa de enfermedades genéticas con fenotipo ocular.

En una publicación que aparece en la revista Nature Communication se analizan estas instrucciones genéticas clave, un trabajo de los investigadores del Centro Andaluz de Biología del Desarrollo y del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, en colaboración con otros centros como Cabimer, CSIC, la Junta, las universidades de Sevilla, Olavide y el Institute of Medical Research de Sídney.

En este trabajo se han combinado técnicas de secuenciación masiva para interrogar las redes genéticas en el pez cebra como "organismo modelo", centrándose en la bifurcación temprana de estas redes a partir de una única.

Entre los resultados destaca la caracterización de los motivos principales de unión al ADN que dirigen la diferenciación del epitelio pigmentado reprimiendo la de la retina neural y viceversa, ha explicado Juan Ramón Martínez, investigador principal del estudio y miembro del Grupo de Investigación Regulación Génica y Morfogénesis del CABD, un centro mixto del CSIC, la Universidad Pablo de Olavide y la Junta de Andalucía.

Se ha hallado que la identidad del epitelio pigmentado depende de dos ondas consecutivas de regulación transcripcional y que la misma lógica regulatoria puede extrapolarse a células humanas en diferenciación a pigmentario.

"Esta observación abre la puerta a la optimización de este tipo de cultivos para su uso en terapia celular paliativa de las enfermedades neurodegenerativas del ojo", ha indicado.

La coautora del estudio, Paola Bovolenta, del CBM, ha manifestado que el estudio proporciona mucha información que permitirá estudiar en profundidad similitudes y también diferencias entre los mecanismos genéticos que regulan el crecimiento del ojo entre distintas especies.

"El ojo de un pez crece durante toda la vida y esto podría proporcionar más claves sobre cómo recuperar esta capacidad en caso de enfermedades neurodegenerativas", ha añadido.

La visión depende de la interacción intima entre dos tejidos, por un lado la retina neural, con capacidad fotorreceptiva, y el epitelio pigmentado, que mantiene la homeostasis de los fotorreceptores reciclando activamente membranas y pigmentos visuales.

La degeneración de cualquiera de estos dos elementos conduce a procesos de ceguera progresiva, contra los cuales las terapias de reemplazo celular son una promesa de futuro.

Para progresar en el desarrollo de estas terapias es imprescindible entender en profundidad las redes genéticas que especifican ambos tipos celulares.