La pandemia hunde la emancipación de los jóvenes a cifras de 1999

Solo un 15,6 % de los jóvenes españoles estaba emancipado a finales de 2020, un año marcado por la pandemia de Covid que ha hundido ese porcentaje tres puntos en un año hasta niveles de 1999, según el informe del Observatorio de Emancipación Juvenil del Consejo de Juventud de España (CJE).

El Consejo ha presentado este viernes en el Congreso los datos de emancipación del segundo semestre de 2020 en un acto que ha inaugurado la presidenta de la Cámara, Meritxell Batet.

A finales de 2020, tan solo 1,5 de cada 10 personas jóvenes vivían en un hogar independiente al de origen. Así, la tasa de emancipación, que ya había bajado al 17,3 % en el primer semestre de 2020, se desplomó al 15,8 % en el segundo.

Un dato que se relaciona de forma directa con una persistente reducción de la tasa de actividad juvenil, ya que poco más de la mitad de las personas jóvenes en España (52,2 %) se podría considerar "activa" laboralmente en el cuarto trimestre de 2020.

Y también con la pobreza, dado que en 2019 el 31,7% de las personas jóvenes en España se encontraban en riesgo de pobreza y exclusión social, situación que ha empeorado con la pandemia y su correspondiente crisis económica, según ha declarado la vicepresidenta del Consejo de Juventud de España, Margarita Guerrero, quien ha lamentado: "En la España del siglo XXI uno de cada tres jóvenes es pobre.

El informe de 2020 refleja que la emancipación en solitario es más habitual entre los hombres que entre las mujeres, con un 24,6 % y un 14,2 %, respectivamente, sin embargo, el porcentaje de emancipación entre los jóvenes sigue siendo superior en mujeres que en hombres.

Por otro lado, el documento recoge que los jóvenes españoles optan a trabajos no cualificados, como la hostelería, los servicios y el comercio, uno de los sectores más afectados por la pandemia.

También se observa el aumento en el número de jóvenes que se encuentran "sobrecualificados": 4 de cada 10 personas jóvenes con estudios superiores terminados (y que ya no seguía estudiando) se encontraba ocupando un puesto para el que desempeñaban tareas inferiores a las de su formación (41,8 %).

La precariedad de los empleos, la temporalidad, el aumento del precio del alquiler y la dificultad para encontrar un trabajo acorde a su formación son los factores que influyen en la inestabilidad que están sufriendo los jóvenes actualmente y hace que se encuentren en una situación de inestabilidad que les impida salir del domicilio familiar.