Los antidisturbios de la Policía llegan al juicio del procés en Semana Santa

El juicio del "procés" se adentra en la Semana Santa con el testimonio del número dos de Daniel Baena, el teniente coronel de la Guardia Civil que lideró la investigación sobre los preparativos del 1-O, y los de los primeros antidisturbios de la Policía Nacional que resultaron heridos en el referéndum.

Mientras una parte de los ciudadanos disfruta de un ligero descanso, el Tribunal Supremo no se da tregua esta semana, en la que están previstas sesiones lunes, martes y miércoles con más de sesenta testificales en el calendario.

Será el número dos de Baena, jefe de la policía judicial de la Guardia Civil en Cataluña, quien dé inicio a la décima semana del juicio después de que no pudiese declarar hace semanas por una indisposición.

Testificará sobre su papel de secretario de los atestados que nutrieron la causa de los preparativos del referéndum, declarado ilegal, en el juzgado 13 de Barcelona, y que sirvieron también para alimentar el procedimiento del Supremo contra la cúpula del "procés".

Unos informes muy criticados por las defensas, que dudan de la imparcialidad de la investigación de la Guardia Civil, como así se lo pusieron de manifiesto en sus preguntas a Baena, a quien cuestionaron una actitud connivente con la Fiscalía, de la que previsiblemente también dejarán constancia en sus interrogatorios a su número dos.

Tras este ínterin (término usualmente acuñado por los policías en sus testificales), llegará una larga tanda de agentes de la unidad de antidisturbios (UIP) de la Policía Nacional que resultaron heridos tras su intervención el 1-O.

Entre ellos no figura un subinspector de Policía imputado en el Juzgado de Instrucción 7 de Barcelona, donde se investigan las cargas del 1-O, dado que la Fiscalía ha renunciado a él.

Los colegios Jaume Balmes o Joan Fuster, de Barcelona; el instituto Torreforta, de Tarragona; el Verd, de Girona; o la Escuela Oficial de Idiomas, de Lleida, son algunos de los centros donde actuaron los antidisturbios citados esta semana.

También el ya conocido instituto Ramón Llull de Barcelona, donde los agentes coinciden en afirmar que se produjeron las situaciones más conflictivas, lo que motivó que la Policía tuviese que disparar pelotas de goma que provocaron que un votante, Roger Español, perdiera la visión de un ojo. Por parte de la Policía, siete agentes resultaron heridos.

Conocerá también el Supremo las experiencias de los antidisturbios en la Escola Mediterrània y el Pau Claris, también de Barcelona, donde tuvieron lugar otras de las situaciones de más tensión de la jornada.

Eso será mañana, cuando los relatos estarán centrados en la actuación de la Policía en Barcelona. Al día siguiente se conocerán los testimonios relacionados con varios centros de Tarragona y uno de Girona de la mano de alrededor de una veintena de testigos; y ya al filo de las fiestas, el miércoles, colegios de Lleida protagonizarán las últimas testificales.

Así finalizará la décima semana del juicio del "procés", que volverá de la pausa de Semana Santa el 23 de abril, día en que la política regresará al Supremo.

Lo hará de la mano del vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonés, pero también de los exconsellers que dejaron el Govern poco antes del 1-O, al apostar el independentismo por la vía unilateral: Jordi Jané (Interior), Meritxell Ruiz (Educación) y Jordi Baiget (Empresa).