"Tuve que sacar a mi hijo a trozos del coche"

Antonio Moreno, guardia civil retirado, perdió a su hijo Fabio cuando tenía 3 en 1991 años tras explotar una bomba lapa en los bajos de su coche, colocada por el etarra 'Javi de Usánsolo', que salió ayer de la cárcel. ESCUCHA AQUÍ LA ENTREVISTA COMPLETAAntonio Moreno es una Guardia Civil retirado y padre de Fabio Moreno, que el 7 de noviembre de 1991, cuando tenía 3 años, murió a causa de una bomba lapa que el etarra ‘Javi de Usansolo’ colocó en los bajos del coche de su padre en Getxo. En el coche también su hermano Alexander, que pudo salvar su vida. Este miércoles, el etarra salió de la cárcel gracias a la derogación de la Doctrina Parot y fue recibido en su pueblo, Galdákano, con cohetes. Un día, el de ayer, que Antonio Moreno pasó “con mucha pena y bastante mal”, según ha contado en Mediodía COPE.“Es algo que nunca esperas que pase, sabíamos que tarde o temprano tenía que salir, pero no esperamos que fuese tan pronto. Es un día muy aciago, muy malo”, ha dicho Antonio Moreno. Este Guardia Civil ha relatado en los micrófonos de COPE cómo actuó en cuanto explotó la bomba: “Yo saqué a mi hijo Alex del coche, que estaba bien, y cuando fui a sacar a mi hijo Fabio tuve que sacarlo a trozos, no pude sacar a mi hijo entero, tuve que sacarlo a trozos”.“No creo que haya persona ni ser humano que se le pueda olvidar, a no ser que seas una alimaña como esta gente, que a ellos les da igual. Como ser humano eso es imborrable, eso está ahí noche y día. Cada vez que vez un niño piensas en ese momento. No es una cosa muy agradable, para nada”, explica Antonio Moreno. Después de 22 años, si Antonio Moreno se encontrase por la calle al terrorista le preguntaría: “¿Por qué mi hijo? No creo yo que mi hijo fuese ningún impedimento para la libertad vasca”. “Si fuese una alimaña como él es muy probable que hiciese alguna barbaridad, pero mi fe cristiana me hace ver que eso no sería lo que debía de hacer”. Tras la derogación de la doctrina Parot por parte del Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo, Antonio Moreno tiene otra pregunta: “Hemos llegado a confundir que el delincuente tiene todos los derechos, pero ¿y las víctimas, qué derechos tenemos? Esta gente va a salir tarde o temprano, van a poder estar con su familia. Yo no voy a poder estar con mi hijo. Y cuando se habla, se habla y se habla.. y todo son alegrías para ellos, y todos tienen derechos… Pero ¿nosotros qué? La verdad es que duele bastante”. A su otro hijo, Alexander, que presenció la muerte de su hermano y que ahora tiene 24 años, “tanto su madre como yo le hemos inculcado que no tiene que vivir en el rencor. Tiene que hacer su vida, tiene que hacer lo que cualquier chico normal. Es un crío con la cabeza muy bien amueblada”, ha contado Antonio en Mediodía COPE.