Para Leonardo Muñoz, la herencia de su tío le ha arruinado la vida. De él heredó unas tierras en las que había trabajado toda su vida y por las cuales, tenía que pagar en impuesto 80.000 euros. Ante la imposibilidad de pagar en efectivo, pidió pagar en especias con las tierras, pero mientras esperaba la respuesta de la Junta de Andalucía el banco empezó a embargarle los bienes. "La cosecha la he perdido, nadie me ha echado una mano". Ante la imposibilidad de pagar el impuesto, muchos herededos optan por renunciar a la herencia, quedándose al final el Estado con las propiedades o el dinero. Lo ha contado en TRECE