Pues ya hemos salido de dudas. El presidente del Gobierno en funciones ha comparecido para comunicar fundamentalmente dos cosas: la primera que acepta el encargo del Rey de tratar de formar Gobierno y la segunda, que ahora va iniciar una ronda de contactos con todos los grupos políticos. También con el Partido Popular y con Ciudadanos, tal y como le venía solicitando por otra parte la diputada naranja Inés arrimadas desde hace tiempo.

Pero, a tenor de las palabras del propio Pedro Sánchez tiene toda la pinta de que esas reuniones con los principales líderes de la oposición van a ser poco más que una mascarada. ¿Por qué una mascarada? Porque si nos fijamos un poco en lo que ha dicho Pedro Sánchez deja bastante a las claras cuál es su idea. Al Partido Popular, en esa breve declaración, Pedro Sánchez le ha echado una buena bronca porque dice él que son los responsables del bloqueo, y eso que Pablo Casado la misma noche electoral dijo que tendía la mano, que el Partido Popular no sería precisamente eso, una formación de bloqueo, le llamó a Pedro Sánchez y ni le ha respondido hasta ahora la llamada. A pesar de eso, bronca importante de Pedro Sánchez al Partido Popular y en cambio cómo se ha referido a Esquerra Republicana al que está cortejando en las últimas semanas ha agradecido su actitud en esa negociación entre el partido socialista y los independentistas. Blanco y en botella.