FOFASTA se propone construir un colegio en el Congo
El promotor y administrador de esta sociación católica, Daniel Medina, ha etsado en 'Mediodía COPE' con Pilar García Muñiz
La República Democrática del Congo fue el quinto país más pobre del planeta en 2020, según los datos del Fondo Monetario Internacional. La violencia que azota el país desde hace décadas ha provocado que millones de personas se hayan visto obligadas a huir para salvar su vida y la de sus familias. En los últimos dos años, tan solo en la provincia de Kivu del Norte, cerca de dos millones de personas han tenido que huir de sus hogares debido a la inseguridad y la violencia.
De esos dos millones de desplazados y refugiados, más de la mitad son mujeres y niños: allí, una mujer es violada, de media, más de una vez en su vida. Además, según datos de la FAO, 27 millones de congoleños padecen inseguridad alimentaria, lo que se traduce en que una de cada tres personas pasa hambre. Esto convierte al país en el lugar del mundo donde más personas necesitan ayuda urgente para llevarse algo a la boca. Pero no todo iban a ser malas noticias: el país tiene una población extremadamente joven: 1 de cada 5 personas son menores de 5 años, algo que despierta una esperanza de cara al futuro del país.
"Nuestra institución se dedica fundamentalmente a la educación y ahora hemos tomado la decisión de iniciar una propuesta educativa y construir un colegio en el Congo", ha dicho el promotor y administrador de FOFASTA, Daniel Medina, en 'Mediodía COPE' con Pilar García Muñiz. Esta asociación católica es la Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino tiene su origen en Argentina per está presente en otros países del mundo.
Para FOFASTA, la formación y la cultura tienen un lugar privilegiado. "La juventud también es una prioridad para nuestra fundacion y en el caso del Congo, especialmente, porque es una población es muy joven", ha dicho Daniel Medina. Sobre el autoempleo en África, el promotor ha contado en 'Mediodía COPE' que el futuro de África pasa posiblemente por ahí y por un desarrollo cultural, "para que con ello llegue después uno tecnológico. Es fundamental que los africanos que se formen allí se queden en sus países de origen, porque el problema es que los que se forman emigran".
