La familia ignaciana celebra una vigilia global por la Creación
La vigilia por la Creación, "Respirando Juntos", está promovida por Jesuitas, organizaciones y redes ignacianas y se celebrará telemáticamente en Manila, Roma, Nueva York
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La familia ingaciana celebrará este viernes 25 de septiembre una vigilia global por la Creación. Promovida por Jesuitas, organizaciones y redes ignacianas, se transmitirá en directo a las 20 horas (hora española) a través del canal de Youtube de la curia de la Compañía de Jesús en Roma.
Contará con las reflexiones y testimonios de las personas y comunidades directamente afectadas combinadas con momentos interactivos y gestos simbólicos. Tendrá lugar el 25 de septiembre a las 20 horas (Manila, Roma, Nueva York) en esos tres husos horarios.
Según se puede leer en Ecclesia, la vigilia está coordinada por el Secretariado para la Justicia Social y la Ecología de los jesuitas, y se enmarca dentro del Tiempo de la Creación. Se pondrá el foco en tres de los pulmones del mundo, "con testimonios y reflexiones procedentes de la Amazonía, la Cuenca del Congo y de los bosques asiáticos, entre otras cosas", según explica la Compañía de Jesús.
Compartir y unirse a la vigilia
Desde la familia ignaciana invitan a unirse a esta vigilia: "Muestra cómo experimentas la creación, sacándote una fotografía con una planta de interior o al aire libre y compartela en las redes sociales con el hastagh #BreathingTogether y #SeasonOfCreation y etiquetando a @SJES_Rome", animan.
El padre Xavier Jeyaraj, SJ del Secretariado para la Justicia Social y la Ecología (SJES) de la Curia General de la Compañía de Jesús ha afirmado que "el tiempo de la Creación es un tiempo para renovar nuestra relación con nuestro Creador y toda la creación a través de la celebración, la conversión y el compromiso conjunto. Es un tiempo para unirnos a otros en la oración y la acción, para cuidar de nuestro hogar común. Este año, en medio de la crisis de la pandemia que ha sacudido nuestro mundo, nos hemos despertado a la urgente necesidad de sanar nuestras relaciones con la creación y entre nosotros. Nuestro planeta Tierra anhela un aliento fresco y para ello necesitamos la gracia de Dios. Sabemos que necesitamos el don del Espíritu Santo para re-generar ese aliento fresco y superar la falta de respiración que se está produciendo".
