La creadora de 'Chernobyl' y ganadora del Nobel habla sobre el misterio de la muerte

Svetlana Alexiévich, Nobel de Literatura en 2015, se pregunta qué hay después de la muerte y plantea un sentido espiritual

Tiempo de lectura: 2’

La escritora y periodista bielorrusa Svetlana Alexiévich ha vuelto a salir a la palestra gracias a la adaptación a la televisión de su obra Voces de Chernobyl, que se ha convertido en una de las mejores series de este 2019. Pero Alexiévich ya era conocida tras haber obtenido el Premio Nobel de Literatura en 2015.

Según el fallo del jurado, la bielorrusa fue merecedora del galardón “por documentar en su obra las vidas de los ciudadanos soviéticos y postsoviéticos”. En ese contexto, escribió 'Voces de Chernobyl', un libro en el que recopila historias, recogidas durante más de 10 años, de más de 500 personas que presenciaron el accidente nuclear de Chernobyl, en Ucrania, sucedido en 1986

Entre ellos hay bomberos, políticos, físicos, psicólogos y también residentes de la zona afectada, los famosos liquidadores y familiares de algunos de los fallecidos. En 'Voces de Chernobyl' se exploran las vidas diarias de los ciudadanos afectados de manera directa e indirecta, tanto física como psicológicamente, a raíz de la explosión de la central nuclear.

El Premio Nobel que recibió en 2015 descubrió a muchos su trabajo. Su trayectoria literaria siempre se ha centrado en la realidad, en dar voz a los sin voz, a los invisibles, a los humillados o a los derrotados. Durante su experiencia en Afganistán, tuvo plena conciencia de lo que significaba la muerte. En una entrevista con el diario El Mundo, explica que “La muerte es un misterio. He leído mucho sobre ella. El Libro de los Muertos del Egipto antiguo, ensayos filosóficos y científicos... Hay más razón sobre la muerte en los libros antiguos que en la literatura actual”.

En esa misma entrevista, con motivo de su participación en el Festival Cosmopoética de Córdoba, señala como cree que “el amor y la muerte son los dos asuntos principales en la vida, pero la muerte es más enigmática. Nos interesa qué sucederá después, si existe un más allá... Las preguntas que genera la muerte son más profundas. Además, fíjese, la mayoría de los muertos tiene cara de sorpresa. Como diciendo: 'Qué hago yo aquí'”.

En otro momento del diálogo, el periodista le pregunta si cree que después de la muerte queda algo, y Alexiévich responde: “no quiero estar de acuerdo con que la muerte sea el final. Esos 21 gramos que dicen que pierdes al morir y llaman alma, qué significan. No basta con las respuestas de la ciencia. Hay que ver lo que alojan esos 21 gramos”.

Mientras, está trabajando en un libro sobre el amor. En otra entrevista concedida a la revista Letras Libres, nos deja esta reflexión: “Sólo el amor puede salvar a los que están contagiados por la ira”.

Relacionados

Religión