Chiara, la mujer que rechazó el tratamiento contra el cáncer para salvar a su bebé

Chiara Corbella retrasó el tratamiento que necesitaba contra un cáncer para no poner en peligro la vida de su bebé, y finalmente murió a los 28

Tiempo de lectura: 2’

Chiara Corbella era italiana, guapa y feliz. Se había casado joven con su novio y había tenido una vida intensa a pesar de lo corta que fue. Murió a los 28 años. Pese a su juventud, tenía muy claras sus preferencias y cuando se encontró débil, emabarazada y con un cáncer... lo tuvo claro. Decidió poner la vida de su hijo por delante de la suya propia y pospuso su tratamiento para salvar a su bebé.

Chiara nació en una familia donde se vivía la fe cotidianamente. Desde niña estuvo vinculada a la Renovación Carismática y vivía su fe con naturalidad. En una peregrinación al santuario de Medjugorje, con 18 años, conoce a Enrico con el que inicia un noviazgo no siempre fácil, propio de su edad, con sus idas y venidas, pero que lograron superar juntos.

Chiara y Enrico se casan en 2008 y ella queda pronto embarazada, pero se descubre una grave malformación de la niña que viene en camino. La pequeña murió a la media hora de nacer, después de haber sido bautizada. La situación se repite con el siguiente embarazo, pero ambas experiencias fueron vividas con un sentimiento de aprendizaje y paz. Una actitud que sorprendió a todos los que rodeaban a Chiara.

Por fin, Chiara tiene un embarazo donde todo va bien. Su hijo venía de camino y es entonces, cuando se da cuenta de una lesión en la lengua que pronto pasará a ser de lo que parecía una simple llaga a un tumor. Estando embarazada, Chiara no duda en posponer determinados tratamientos que podrían perjudicar a su hijo, a pesar incluso de que su marido no lo entendiera. Francesco nace sano finalmente el 30 de Mayo de 2011. Sólo entonces empieza con la quimioterapia, pero el tumor ya se había extendido, llegando a afectarle el ojo derecho, que cubrirá con un vendaje para limitar las dificultades en la vista.

La partida al cielo

Las semanas siguientes, pasadas juntas a su marido, Chiara se prepara al encuentro con Cristo, sostenida por los sacramentos. Se retira junto a su familia y su director espiritual para poder vivir ese momento con paz. Muere al mediodía del 13 de Junio de 2012, después haber saludado a todos, parientes y amigos, uno por uno, y haberles dicho a cada uno: “Te quiero”.

El 21 de septiembre del 2018, aniversario de matrimonio de Enrico y Chiara, se abrió en Roma la fase diocesana de la causa de beatificación de Chiara. El testimonio de Enrico, su marido, tendrá lugar en la Parròquia Sant Vicenç de Sarrià, en Barcelona, el próximo jueves, y el sábado en la parroquia San Juan Bautista de Fuenlabrada.

Una parroquia de Barcelona y la parroquia de San Juan Bautista de Fuenlabrada (Madrid) van a albergar el testimonio de Enrico Petrillo, el marido de Chiara y del sacerdote Vito d’Amato, su padre espiritual.

ctv-ovk-photo-2019-10-26-10-31-21

Relacionados

Religión