Cáritas Diocesana de Valladolid crea un fondo específico para atender a los damnificados por el Covid-19

El proyecto persigue dar respuesta a las situaciones de dificultad derivadas de la pandemia del COVID-19

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Parte con 100.000 euros de aportaciones de los sacerdotes y de los trabajadores de la entidad el proyecto ‘Comunidad 2020’ (www.comunidad2020.es) que abarca todo tipo de actuaciones para apoyar las situaciones de dificultad sobrevenidas por la crisis La entidad hace un llamamiento a la solidaridad y a la caridad. “Saldremos reforzados de esta crisis – asegura – si ganamos en comunidad”

Cáritas Diocesana de Valladolid ha puesto en marcha ‘Comunidad 2020’, un proyecto con el que persigue dar respuesta a las situaciones de dificultad derivadas de la pandemia del COVID-19, y que incluye un fondo económico específico, pero también la reorganización y puesta a punto de los servicios de orientación, asesoramiento (laboral, psicológico, jurídico, etc) y acompañamiento que ya presta la entidad y a los que se pretende dotar de un plus de agilidad.

"Esta nueva iniciativa se suma a las puestas en marcha por Cáritas Diocesana a lo largo de estos dos meses de la presencia del virus en nuestra provincia (el centro ‘San José’ en colaboración con el Seminario para acoger a las personas sin hogar, la propuesta “La parroquia te lo acerca” y la campaña “Cada gesto cuenta”, cuyos fondos están permitiendo reforzar sus servicios habituales), con el propósito de articular respuestas inmediatas y concretas a las nuevas situaciones de vulnerabilidad".

La bolsa económica nace ya con 100.000 euros, recaudados en los últimos días gracias a las aportaciones de los sacerdotes y de los trabajadores de la entidad sociocaritativa. En el caso de los curas de Valladolid, las donaciones excepcionales a Cáritas se están produciendo en respuesta al llamamiento efectuado por los obispos, don Ricardo Blázquez, y don Luis Argüello, a que durante los próximos meses cedan parte de su sueldo (o hagan una aportación única) “en un ejercicio de corresponsabilidad y de solidaridad”.

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Solidaridad de largo recorrido

Se trata también de un gesto que se anima a imitar a toda la comunidad cristiana, como ejercicio de la caridad de la Iglesia de Valladolid, y a la sociedad vallisoletana en general, para mantener viva la iniciativa ‘Comunidad 2020’ durante los próximos meses y ante un preocupante futuro socioeconómico. “Este proyecto -explican desde la entidad- nace de la convicción de que saldremos reforzados de la crisis si ganamos en comunidad es decir en espacios humanos donde las personas nos reconocemos, nos vinculamos, nos ponemos a buscar juntos y a apoyarnos mutuamente”; en solidaridad de largo recorrido.

Se pretende, en definitiva, movilizar a la comunidad, captar recursos económicos y articular respuestas a personas o familias afectadas directamente por las consecuencias socioeconómicas del COVID-19. Especialmente personas trabajadoras afectadas por ERTEs o directamente apartadas del mercado laboral; autónomos o propietarios de pequeños negocios familiares con especiales dificultades a causa de esta crisis o aquellas situaciones que claramente resultan sobrevenidas por esta epidemia. Su ámbito de implantación es Valladolid (ciudad y provincia) y dos son los criterios básicos:

- Que se trate de situaciones ciertamente sobrevenidas, consecuencia de esta situación excepcional.

- Que los propios recursos y los del entorno, así como las ayudas públicas, resulten insuficientes para hacer frente a la situación en que se encuentran dichas familias.

A estas personas, además de una ayuda económica, se les ofrecerá información y asesoramiento, así como apoyo social, laboral, psicológico y jurídico. También la posibilidad de formar parte de una red social de ayuda mutua.

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