No es habitual que un político haga autocrítica. Y mucho menos que lo haga con las cuestiones que afectan a la salud e incluso a nuestra propia vida. Por eso, sorprende el mensaje que ha lanzado hoy la presidenta de la Comisión Europea Ursula Von der Leyen: “Todavía queda mucho trabajo por delante para alcanzar nuestro objetivo, a finales de verano haber vacunado al 70% de la población europea”.

En Europa han sido demasiado optimistas en cuanto a la distribución de la vacuna. En España no hemos escuchado, hasta ahora, nada ni medio parecido y siguen fijando el verano como el periodo en el que estará vacunada el 70% de la población.

Aquí, el Ministerio de Sanidad sigue rehaciendo sobre la marcha la estrategia de vacunación. Lo hace ante la falta de concreción inicial y también obligados por las limitaciones de la vacuna de Oxford AstraZeneca, que no se va a suministrar a mayores de 55 años. El consejo interterritorial debate esta tarde la propuesta aprobada por la Comisión de Salud Pública. Está claro que los mayores de 55 años recibirán la vacuna de Pfizer y Moderna.

La novedad que se analizará hoy afecta a los sanitarios que hayan pasado el coronavirus y tengan menos de 55 años. La decisión es que su vacunación se retrase 6 meses desde la fecha de diagnóstico.

Mientras se definen todos estos detalles, las comunidades autónomas se preparan para cuando las vacunas comiencen a llegar de forma masiva. En Cataluña, la Generalitat plantea habilitar el Camp Nou y la Sagrada Familia. En Madrid, también ofrecen grandes espacios, hablan del Palacio de los Deportes o Vistalegre como centros de vacunación.

El proceso de vacunación sigue lento mientras disminuyen los positivos, también la presión hospitalaria y esto está llevando a las comunidades autónomas a levantar restricciones. Algunas, como en el caso del País Vasco, obligadas. Tras la decisión del Tribunal Superior de Justicia de esta comunidad hoy han abierto bares y restaurantes. Nos cuenta un hostelero: “La verdad yo bastante desanimado, solo tiro para adelante porque tengo un hijo de 4 meses. El Gobierno me quita todas las ganas de tirar para adelante”.

Es Xavi, que tiene un bar en Bilbao, que hoy ha vuelto a abrir, gracias a una medida judicial, que es cautelar y a la que miran con urgencia en otras comunidades, como Cataluña, Galicia o Baleares donde se presentaron recursos similares y siguen a la espera.