El Gobierno de coalición sigue dando pasos para sacar adelante los presupuestos. Si no sigues muy de cerca esos movimientos, puede que te preguntes, ¿no lo habían cerrado ya con Ciudadanos? La verdad es que Inés Arrimadas fue tan optimista que se echó en los brazos de Sánchez en un gesto que justificó por la situación excepcional en la que nos encontramos. Todo apunta a que se va a arrepentir.

La realidad es que Podemos no quiere saber nada de Ciudadanos. No es su prioridad y el resto son poses para llegar a lo deseado. El propio Pablo Iglesias se va a reunir mañana con Esquerra y con Bildu para negociar los presupuestos de España, sí, del conjunto de España, que a nadie se le olvide. Son dos de los partidos que facilitaron la investidura de Pedro Sánchez y que ahora ponen condiciones.

Las de Esquerra ya las conocemos. Presupuestos a cambio de presos, de los presos que pretendían dar un golpe de estado, y acelerar la negociación de la mesa por la independencia.

En el caso de Bildu, hoy Arnaldo Otegui lo ha dejado claro. Su apoyo a los presupuestos tendrá muchas condiciones. Otegui ha dicho esta mañana, abro comillas: "No se juega solo cómo hacer frente a la pandemia, sino la dirección política del Estado en los próximos años”.

Es decir, que Bildu quiere marcar la dirección política de España -ellos lo cambian por la palabra Estado porque les salen granos pronunciar España-, quieren marcar el futuro de todos los españoles durante los próximos años. Y no sorprende que Otegui exija beneficios penitenciarios para los presos de ETA a cambio de su apoyo a los presupuestos. Eso entra dentro de lo normal. Lo grave es que el Gobierno le conceda todo lo que pide o, sencillamente, se siente a negociar con él.

Por lo demás, hoy hemos conocido un suceso terrible en Castellón. Un bebé de 10 meses ha muerto tras la agresión sufrida, supuestamente, por su padre. Le golpeó contra los barrotes de la cuna porque no dejaba de llorar. Todo apunta a que esos llantos continuados eran consecuencia de lesiones anteriores. Lo último es que el padre, que tiene 20 años, ha ingresado en prisión preventiva. La madre tiene 17 años y se encuentra en un centro de menores. Y la pregunta que nos hacemos es, ¿qué le puede llevar a un padre a golpear con saña a un bebé de 10 meses hasta causarle la muerte? Sólo una rabia sin límites, descontrolada puede llevar a atentar contra un ser tan indefenso. Terrible.