Los dos periodistas españoles que fueron secuestrados este lunes tras sufrir un ataque en el este de Burkina Faso, han sido asesinados, según ha informado, a falta de una confirmación oficial de las autoridades del país, la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya.

El suceso ha ocurrido en la zona de Pama, donde individuos armados emboscaron a una patrulla de efectivos burkineses contra la caza furtiva.

Alfonso Armada es presidente de Reporteros sin Fronteras en España y ha pasado por los micrófonos de 'La Tarde' para recordar a los dos periodistas fallecidos.

"Conocía mucho a David y también por referencias de trabajos impecables que han hecho ambos. Estamos desolados. A través de delegados de Reporteros sin Fronteras nos enteramos de la noticia. Es una zona en la que las fronteras están difuminadas. Hay grupos que van de un país a otro y es difícil determinar si son delincuentes comunes, yihadistas o terroristas. Además, ha contado en COPE que "buscan fuentes de financiación para sus propios intereses y a veces se ponen la capucha política cuando les interesan".

Francia intenta ayudar e intervenir pero hay grandes franjas que son incontrolables y "el riesgo que se corre es muy grande. Es verdad que Burkina Faso no es de los peores países pero la frontera con Benín es especialmente complicada".

"ES PENOSO QUE HAYAN PERDIDO LA VIDA CONTANDO LO QUE SUCEDE ALLÍ"

David y Roberto formaban parte de esa nueva generación del reporterismo español que acudían a contar la noticia desde donde se producía. Armada es periodista de guerra y ha estado presente en conflictos como el de Sarajevo, en el genocidio de Ruanda. "Cada vez hay menos enviados especiales y uno de los méritos es que se sumergieron sobre el terreno. Hacen un trabajo espléndido con reportajes de amplia duración que ayudan a entender la realidad. Es penoso que hayan perdido la vida contando lo que sucede allí", indicaba el presidente de Reporteros sin Fronteras en 'La Tarde'.

Hernán Zin, también compañero de los periodistas que han fallecido, recibía así la noticia: "Hace veinte minutos. Muy triste. Con mucha pena y tristeza. Con David empecé a trabajar con él compitiendo amistosamente. Con Roberto estuve trabajando en Ruanda, Kenia... Dos grandes personas y reporteros. Una gran pérdida. Estaban muy comprometidos con el trabajo. España tiene una gran tradición de reporterismo.

"David era un navarro echado para delante. Noble como poca gente. Un tipo muy inteligente y brillante. Consciente de los riesgos que asumían. Una cabeza brillante", relataba Zin.

El este y el norte de Burkina Faso ha sufrido un repunte de los ataques por parte de grupos yihadistas, entre ellos la rama de Al Qaeda en el Sahel, el Grupo para el Apoyo del Islam y los Musulmanes (JNIM), y Estado Islámico en el Gran Sáhara (ISGS), que han provocado además un incremento de los enfrentamientos intercomunitarios.

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