Dice Pablo Alonso Coello que el chocolate ‘tiene flavonoles que en algunos estudios decían que mejoraban la elasticidad de los vasos sanguíneos y que además su ingesta disminuía la presión arterial’. Sin embargo tras los estudios realizados, la evaluación ha determinado que el grado de confianza que merecen los resultados de las investigaciones realizadas que asocian el consumo de chocolate con un menor riesgo de mortalidad cardiovascular, es muy bajo.

Lo único cierto es que el chocolate nos gusta en todos lo sabores y presentaciones; más y menos dulces, con frutos secos o sin ellos, pero no nos podemos fiar de los resultados de lo que dicen los estudios porque depende de la cantidad y el tipo de chocolate consumido.

Otro factor que puede influir en los resultados, es que la mayoría de estudios sobre los beneficios del chocolate para la salud están financiados por la industria alimentaria y por lo tanto están mediatizados.

El centro Centro Cochrane Iberoamericano se dedica a realizar revisiones metodológicas, es decir recuperan los estudios que se hacen en todo el mundo y los evalúan críticamente y por eso están tan seguros de que la incidencia del chocolate en la prevención de problemas cardiovasculares nos es tan cierta como nos han venido contando.