Ni una novela ni un relato de buenos y malos. ‘La última batalla de Blas de Lezo’ es una investigación histórica basada exclusivamente en documentos contrastados sobre el mítico navegante español. Así lo definen sus dos autoras María Beltran y Carolina Aguado, investigadoras del Museo Naval.

Como cuentan ambas, la novedad aportada por este libro reside en que es la primera vez que hay una aproximación a la defensa de los castillos de San Luis y san Felipe solo con testimonios de los testigos directos y en que se reconstruye el testimonio de Blas de Lezo. Por último su lugar de enterramiento, uno de sus principales misterios, es abordado de manera inédita.

Precisamente el relato de las causas de su muerte y el lugar de su enterramiento es una pieza central de esta investigación. Cuando María y Carolina encontraron en el museo naval una carta del hijo de Blas de Lezo que contenía la localización donde su padre fue enterrado comenzó la investigación centrada eneste hecho. “Todo comenzó con la idea de encontrar la partida de defunción”, comentan. No obstante, sus viajes a Cartagena de Indias aún no han tenido resultados al encontrrse con un archivo histórico “blindado”.

Así, esta obra se centra en la Batalla de Indias y contrasta, como dicen sus autoras, “con escritos que no profundizan en hechos reales”. En este caso, se cuenta el desarrollo militar de la batalla y se incorporan testimonios directos de españoles e ingleses que allí participaban sin dejar de tener en cuenta que hay partes subjetivas en ellos. “Estas visiones personales se dejan para un segundo bloque del libro que entra en las personas y cómo actuaron” explican.

De este modo se presenta la investigación sobre una batalla que, reconocen, ha sido mitificada a pesar de la gran hazaña que fue ganar a una flota inglesa tan numerosa. Muchos relatos han situado la muerte de Lezo como consecuencia de las heridas de la guerra. Sin embargo, uno de los datos más novedosos y trascendentes que aporta la investigación es que el almirante “el almirante murió por una enfermedad y no por las heridas de la batalla. Seguramente fuera tifus” afirman las autoras de ‘La última batalla de Blas de Lezo’.