La inflación en España se disparó en el mes de julio al 10,8 %, la misma tasa que adelantó el Instituto Nacional de Estadística (INE) el pasado 29 de julio, seis décimas por encima de la registrada el mes anterior y la más elevada desde septiembre de 1984.

La vida nos cuesta casi un 11% más que en la misma fecha del 2021, sobre todo por los alimentos y bebidas no alcohólicas y la energía. A esto hay que sumar el IPC subyacente, el que excluye alimentos frescos y energía que es lo más volátil, y que, según las últimas estimaciones, habría seguido escalando en julio hasta el 6,1%. Este dato supone el triple del objetivo comunitario y es el claro reflejo de que no va a ser fácil rebajar los precios.

En 'Herrera en COPE' ha estado Raymond Torres, el director de Coyuntura Económica de Funcas, y sobre la inflación subyacente: "Nos debe preocupar, de alguna manera nos demuestra que se está cronificando la inflación, porque se trata de todo tipo de productos de bienes y servicio. Es mucho más díficil de reducir o atenuar las pensiones de inflación subyacente, es decir descartando la energía y los alimentos".

"Si llegase a la paz Putin con Ucrania, eso abarataría el gas".

Respecto a la subida de los tipos de interés: "El BCE tiene la mirada puesta en la inflación subyacente, en la euro zona está en torno al 4% y nosotros al 6%, habrá una intervención pronto, ha prometido que actuará con graduabilidad".

Al ser preguntado sobre si el período de inflación durará mucho más: "Nosotros pensamos que a partir del otoño, irá moderandose, el gas, electricidad o la gasolina irán bajando poco a poco. La brecha es muy importante, preocupante para muchos hogares, por lo menos no sube el paro. Lo más importante sería conseguir un gran pacto de rentas para aquellos que perciben transferencias públicas de un nivel elevado, es lo más deseable."