"Este viernes nos deja, también, la historia de Grace…

Se trata de una robot humanoide creada por una empresa de Hong Kong. Es muy realista, mueve hasta 48 músculos faciales… Grace va vestida con una bata de enfermera y es capaz de visitar enfermos, darles conversación, tomarles la temperatura o medir su respuesta ante diferentes estímulos. Lo puede hacer en inglés, en mandarín o en cantonés.

Fue creada, en un principio, para ayudar en los hospitales durante esta crisis del coronavirus. La idea era que aligerara el trabajo de los sanitarios haciendo las tareas más sencillas. Y eso lo ha cumplido con nota…

Por eso, ahora la empresa que la creó va a empezar a producir en masa, a partir del mes de agosto, otros robots como ella…

El reto no sólo va a ser mejorar sus funciones sino, también, reducir su precio… Ahora mismo, cuesta como un coche de lujo".