El duro testimonio de una marroquí conversa: "En Marruecos, miles de cristianos viven su fe en secreto"

La vida de los cristianos marroquíes no es sencilla y muchos viven perseguidos por su fe

Tiempo de lectura: 1' Actualizado 12:20

El viaje del Papa Francisco por Marruecos tiene como principal objetivo tender puentes entre cristianos y musulmanes, y potenciar el diálogo con el ala moderada del Islam, como una manera de luchar contra el yihadismo y de hacer un llamamiento a la paz.

La situación del cristianismo en el país vecino, sin embargo, deja aún mucho que desear, y la libertad religiosa es inexistente para las personas con nacionalidad marroquí. 

Así lo ha explicado en el 'Fin de Semana' de COPE, Sofía, una mujer marroquí que se ha convertido al cristianismo y que ahora reside en nuestro país. Los marroquíes que deseen vivir la fe en Cristo deben hacerlo a escondidas, ya que la ley prohibe que un marroquí se convierta al Islam: “La gente aquí no sabe nada más de Jesús que la Biblia. Entrar a las iglesias está prohibido. Los conversos aquí pueden ser encarcelados, expulsados de su familia. Tienen que vivirlo en secreto”.

Por eso, las personas que desean profesar el cristianismo no tienen más remedio que hacerlo en secreto: “En Marruecos hay miles y miles de cristianos que viven la fe en secreto. Les da igual dar la vida por Jesús”.

Pero la fe en Jesús no solo conlleva el peligro de cárcel, sino que también puede provocar el rechazo de tu propio entorno: “Mis padres no me han repudiado. Pero familia más lejana, como mis tíos, piensan que estoy loca”.

Sofía asegura que, para muchas personas en Marruecos, el Islam es sinónimo de castigo y normas: “El Islam para mí es miedo, prohibición. La gente tiene muchísimo miedo. Pero por supuesto, hay muchas personas con deseo de paz”. Una puerta abierta a la esperanza y a que ambas religiones puedan convivir en paz.