En 'El Espejo' Mons. Miguel Maury, Nuncio Apostólico en Bucarest, ha subrayado que el mensaje que el Papa Francisco ha dejado en Rumanía ha sido un mensaje de unidad y de respeto, en sintonía con el lema escogido para el viaje, "Caminemos juntos".

El nuncio ha explicado que los problemas y los retos a los que se enfrenta Rumanía son comunes a toda Europa, por eso las palabras del pontífice en este viaje han sido tan relevantes: "Hablando a Rumanía hablaba a toda Europa".

Al comparar este viaje con el de su antecesor San Juan Pablo II ha distinguido que "si bien el anterior viaje fue a la ortodoxia, éste ha sido más bien una visita al país y a las comunidades católicas".

Ha descatado las palabras de aliento a los jóvenes a quienes ha recordado que "la división es fruto del maligno" y la invitación a todos los rumanos que viven fuera del país a que "no pierdan sus raíces".

Mons. Miguel Maury ha afirmado que el hilo conductor de los gestos y los discursos del Papa Francisco en su último viaje ha sido la unidad y el respeto y ha destacado las palabras de perdón a la comunidad gitana, de quienes ha destacado "la defensa de la vida y la familia, la espontaneidad, la alegría y la solidaridad".