Una fuerte tormenta, acompañada de vientos de gran intensidad, ha causado en las últimas horas diversos daños materiales en la localidad navarra de Tafalla, sin causar heridos.

Una familia ha tenido que ser rescatada cuando el coche en el que viajaba ha quedado semisumergido en el agua embalsada, según informa el Gobierno de Navarra que indica que los bomberos del parque comarcal, con apoyo de unidades de Cordovilla, se han ocupado de realizar labores de achique y aseguramiento de elementos que corren riesgo de desprenderse.

La tormenta comenzó poco después de las 19 horas de ayer y en los primeros 10 minutos se midieron 33,7 litros por metro cuadrado, registrándose en total 43,7 litros. La lluvia ha estado acompañada de vientos muy fuertes, con rachas de hasta 122,4 kilómetros por hora.

Los sumideros no han podido evacuar el agua caída y se han producido inundaciones de bajeras, garajes y locales comerciales y el viento además ha dañado seriamente dos chimeneas, que han tenido que ser aseguradas por los bomberos para impedir que se desplomaran, así como a la cubierta del velódromo, que también se ha inundado parcialmente. Varios árboles han caído o han perdido las ramas.

Los bomberos han tenido que realizar, al menos, 30 intervenciones, entre ellas el rescate de los ocupantes del coche que había quedado parcialmente sumergido en una balsa de agua.

Hasta Tafalla ha sido desplazado el camión escala del parque de Cordovilla para que los bomberos accedan a los tejados para retirar las tejas y otros elementos que han sido removidos por el viento.

Personal del Servicio Forestal del Gobierno de Navarra trabaja en la retirada de árboles y ramas haciendo uso de vehículos todo terreno.

La Policía Foral, así como agentes de la Policía Municipal y de la Guardia Civil, se han ocupado de dirigir la circulación y han colaborado en las tareas de limpieza.

Las principales carreteras de acceso a Tafalla quedaron cortadas mal formarse balsas en la calzada, aunque ya se puede circular con normalidad.

Está previsto que hoy se haga una revisión general por parte de los bomberos para comprobar si existen elementos y estructuras que pudieran correr riesgo de desprendimiento.

También se han registrado tormentas de cierta intensidad en San Adrián y Mendavia, según señala el Ejecutivo.