Los sindicatos CCOO y FeSP-UGT han valorado que trabajadores del 90 por ciento de las empresas afectadas por la negociación del convenio del sector de discapacidad hayan secundado las concentraciones ante las sedes patronales para reclamar mejoras laborales y salariales.

Bajo el lema "En defensa de un convenio digno, Movilízate", miles de trabajadores participaron ayer en las protestas para exigir una negociación real del convenio que lleva un año tratándose y que se encuentra en "punto muerto", según han denunciado los sindicatos con representatividad en la mesa negociadora del sector de la discapacidad.

"Después de un año de iniciadas las negociaciones, la situación de parálisis es especialmente preocupante, ya que, independientemente del bloqueo que impide avanzar en la mejora de las condiciones laborales, el colectivo más en precario, que tiene vinculadas sus retribuciones al Salario Mínimo Interprofesional, ve cómo sus salarios quedan congelados sin que se aplique el incremento aprobado para 2018", lamenta CCOO en un comunicado.

Ante esta situación, los sindicatos advierten de que "si las organizaciones patronales no rectifican y siguen ninguneando la negociación colectiva, sin escuchar y afrontar de una manera real los planteamientos sindicales, las medidas de presión irán en aumento".

El colectivo, formado por 221.058 empleados, la mayoría mujeres (144.715), desempeña sus funciones laborales en centros especiales de empleo, centros de atención especializada y centros educativos, en casi 4.000 empresas repartidas por todo el estado.

Los sindicatos denuncian las precarias condiciones laborales de esos trabajadores, el 80 por ciento con salarios inferiores a mil euros y con jornadas laborales excesivas modificadas por los empresarios a través de una "bolsa de horas", pero también la incidencia de manera directa en la calidad del servicio público que reciben los usuarios y sus familias.