Una delegación de Médicos del Mundo ha expuesto hoy al intergrupo parlamentario de Amistad con Palestina del Congreso la "dramática situación sanitaria" que sufre la población de Gaza y ha exigido al Gobierno que no exporte material para seguridad y militar a Israel.

"La mitad de los medicamentos que se consideran básicos no están disponibles, los desplazamientos de las ambulancias están restringidos, y más de 200 profesionales sanitarios han resultado heridos en dos meses", ha denunciado ante los diputados el presidente de esta ONG, Jesús Félix Hoyo.

Asimismo, la organización humanitaria, que lleva trabajando en Palestina desde 2006, ha exigido al Gobierno que no exporte material para seguridad y militar a Israel, según ha informado Médicos del Mundo en un comunicado.

No obstante, ha aplaudido que España sea uno de los tres países de la UE -junto a Bélgica y Eslovenia- que han votado en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU a favor de que se lleve a cabo una investigación sobre las más de 12.000 personas heridas y más de 60 muertas desde marzo.

Por ello, espera que el Ejecutivo "se mantenga en esa decisión y resista las presiones diplomáticas".

Además, considera que "las potenciales evidencias de violaciones del Derecho Internacional Humanitario" que se constaten en esa comisión se trasladen a la Corte Penal Internacional.

Según los datos de esta organización, 1,3 millones de personas en Gaza requieren ayuda humanitaria, casi la mitad de los hogares (47%) sufre grave o moderada inseguridad alimentaria y en la inmensa mayoría (97%) el agua corriente no es buena para el consumo humano.

Entre el 30 de marzo y el 15 de mayo, 12.271 personas han resultado heridas, de ellas 2.770 personas solo el 14 de mayo, cuando otras 60 fallecieron, de las que seis eran niños y una era un profesional sanitario.

Un periodo en el que "han resultado heridas más personas que durante la ofensiva militar de Israel contra Gaza en 2014, que duró 51 días. Solo un soldado israelí ha resultado herido", ha zanjado.

En todo caso, cree que "la vida en la Franja sólo puede ser soportable levantando inmediatamente el bloqueo al que está sometida, por el que dos millones de personas sufren un castigo colectivo".

Por último, la ONG ha centrado la atención sobre el constante aumento de las demoliciones de infraestructuras palestinas en Cisjordania -incluidas viviendas o colegios- y su impacto en la salud mental de las comunidades afectadas.