El Congreso ha aprobado una proposición no de ley del PP para prevenir la violencia de género digital entre la juventud, a pesar de que los grupos parlamentarios la han calificado de "placebo" o de parche", tras ser transaccionada por los grupos Unidos Podemos, Ciudadanos y Mixto.

En su defensa de la iniciativa -aprobada por 333 votos, 1 en contra y 5 abstenciones- la diputada María del Carmen Dueñas, se ha referido a las redes sociales "como una importante caldo de cultivo para ejercer una violencia de control sobre las adolescentes" y ha recordado que en 2017 fueron juzgados 266 menores por delitos de malos tratos (un 48 % más que en 2016).

El texto aprobado pide que se siga impulsando, en el marco del Plan Director para la Mejora de la Convivencia y la Seguridad en Centros Educativos y en el marco de lo aprobado en el Pacto contra la Violencia de Género, la concienciación y la formación para la igualdad tanto de los adolescentes como de sus padres, madres y docentes, así como continuar con las campañas específicas en medios digitales.

El PSOE ha dicho que la propuesta "no hace daño, pero no aporta nada" y se queda corta respecto a las expectativas de la sociedad en esta materia.

Lo ha manifestado la diputada socialista Ángeles Álvarez que cree que la iniciativa está "muy por debajo del pacto contra la violencia machista" y ha acusado al PP de "dejación y desidia" al no haber impulsado las reformas reclamadas en este acuerdo y de no haber sido capaces de "mantener la herencia del 016 o de los dispositivos de seguimiento".

Además ha pedido al PP que "no obstaculice la ingente tarea" que el Gobierno socialista tiene "para deshacer todos los desaguisados" que los populares han hecho contra las víctimas y para avanzar en la lucha contra el machismo.

Desde Unidos Podemos, Ángela Rodríguez, ha manifestado la preocupación de su grupo por la violencia en las redes, pero ha asegurado que "no se soluciona con parches pequeños" como esta iniciativa.

Por su parte, María Virginia Millán, de Ciudadanos ha criticado que no se haya convocado el Observatorio contra la Violencia Escolar en 7 años y que ahora se quiera solucionar con una proposición no de ley.