Los perros que han ayudado a la Guardia Civil a inspeccionar la nave de Asados en la que fue encontrada Diana Quer han dado este jueves con rastros biológicos. A pesar de que las instalaciones habían sido limpiadas hace unos meses, los agentes han tomado "muchas muestras" según ha explicado el abogado de la acusación particular Ricardo Pérez Lama que añade que  "ahora toca analizarlas para saber si son relevantes para la investigación".

Durante toda la mañana han entrado y salido de esas instalaciones los investigadores que participaron en la inspección ocular que había autorizado el juez instructor a petición de los padres de la chica, informa Patricia Iglesias desde Rianxo.

En las diligencias, que han durado más de cuatro horas, no estaba presente El Chicle, que sí tendrá que acudir a la reconstrucción de los hechos pedida por los padres de la chica y que está pendiente de autorización judicial. 

Mientras, estamos a la espera de los datos definitivos de la autopsia. Los preliminares apuntan a muerte por asfixia y descartan el atropello fortuíto que ha mantenido el detenido por en crimen ante su abogado.

La familia de Diana pudo enterrarla ayer, por fin, en Pozuelo de Alarcón, su localidad de residencia.