A pesar de que en noviembre de 2016, el presidente regional Miguel Ángel Revilla dio el ok a esta obra que está llevando a cabo el ministerio de medio ambiente, ahora los regionalistas consideran que se esta destruyendo el valor paisajístico del entorno de la magdalena De esta forma se suman a las protestas llevadas a cabo por diversos colectivos ecologistas y por eso pedirán su paralización tanto el ayuntamiento como en el parlamentario. Consideran que el partido popular no puede hacer lo que le de la gana.
El cambio de criterio de los regionalistas se justifica asegurando que el Ayuntamiento les ha sorprendido y que no conocían cual era el proyecto que iban a llevar a cabo.