La consejería de “Asuntos Exteriores” de la Generalitat de Cataluña utilizó 29 millones de euros para actividades dirigidas a la internacionalización del proceso independentista, según han informado fuentes oficiales. De los 64 millones de euros con los que estuvo dotada la denominada Consejería de Relaciones Institucionales y Transparencia de la Generalitat, aparecen como gastos corrientes justificados 35 millones. La cantidad restante -29 millones - se habría empleado para financiar actos destinados a fomentar el apoyo al procés, como conferencias de altos cargos del gobierno catalán en defensa del secesionismo.

Jugaron un papel fundamental en esa estrategia las delegaciones de la Generalitat en el exterior, que a día de hoy están ya cerradas, con excepción de la de Bruselas, encargada de representar los intereses de la autonomía catalana ante la Unión Europea. Han quedado clausuradas aquéllas cuya actuación no correspondía al marco constitucional ni a la Ley de Acción Exterior, es decir, 11 de las 12 que se habían abierto.

El cierre de estas delegaciones no ha sido fácil porque algunos de los cargos de estas oficinas han opuesto resistencia, de acuerdo con estas fuentes, que indican que aún hay pequeños flecos pendientes, como la entrega de las llaves de las oficinas alquiladas y el traslado de mobiliario. Ahora el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación ha puesto en marcha la liquidación de Diplocat, que formaba parte de la consejería dirigida por Raúl Romeva. En ese organismo -que actuaba como un cuerpo diplomático propio de la Generalitat- ha comenzado a aplicarse un ERE, que afectará a 18 personas en Diplocat y a 34 de las delegaciones.

Desde el Ministerio habían pedido a la Generalitat que reubicara a los empleados de las delegaciones, pero no lo ha hecho. Las personas que están llevando a cabo la liquidación pertenecen a la Generalitat, pero fueron nombradas por los Ministerios de Hacienda y Asuntos Exteriores. Las fuentes citadas han señalado que han encontrado en Diplocat gastos llamativos en tarjetas de crédito, que podrían estar relacionados con la financiación del proceso independentista. El 15 de abril quedará definitivamente extinguido Diplocat, incluso en el caso de que hubiera un nuevo gobierno en la Generalitat. Si ese gobierno decidiera reactivar este servicio diplomático autónomo, el Ministerio de Asuntos Exteriores recurriría a los tribunales.