El exlehendakari Patxi López ha defendido hoy el diálogo entre el Gobierno y la Generalitat catalana frente a quienes "se escondieron detrás de los jueces", en alusión al PP, y los que se "envolvieron en banderas patrias para buscar una legitimidad que no tenían", en referencia a Cs.

López se ha expresado en estos términos en la Comisión de Política Territorial, donde ha comparecido la ministra del ramo, Meritxell Batet, para exponer las líneas fundamentales de su departamento.

En su intervención, ha criticado duramente al portavoz de Ciudadanos, José Manuel Villegas, y le ha reprochado que hable de chantaje cuando el Gobierno socialista lo que está haciendo es buscar una solución al problema catalán y evitar que el conflicto se pudra hasta convertirse en irresoluble.

"Desde luego, con este grupo parlamentario, con el PSOE y con este Gobierno no van a contar para eso", ha advertido, después de pedir que cese "la guerra de banderas a ver quién la pone más grande".

A su juicio, lo "prioritario" en Cataluña es recuperar la política en las instituciones sabiendo que la legalidad es "básica", pero que "la justicia y los jueces no pueden sustituir a la política para buscar soluciones".

Después de hacer hincapié en que en democracia no hay legitimidad alguna por encima de la legalidad constitucional, López ha incidido en que, por esa razón, el PSOE "hace una defensa cerrada" de la Carta Magna e incluso la quiere cambiar para mejorarla.

En este sentido, ha contestado las críticas de la diputada de EH Bildu Marian Beitialarrangoitia y le ha dicho que él también es vasco y que la reforma que propone el PSOE le "satisface".

También ha tenido palabras para el portavoz de ERC, Joan Tardá, quien ha considerado "una victoria" el hecho de que Sánchez esté dispuesto a escuchar todas las propuestas que le haga el lunes el presidente catalán, Quim Torra.

"El diálogo, al que los socialistas nunca hemos tenido miedo, no es la victoria de nadie, es el triunfo de la política", ha replicado, convencido de la necesidad de "recuperar la política y abrir el diálogo" entre el Gobierno de España y el de Cataluña.

Al hilo de lo anterior, ha reclamado a los independentistas que "practiquen en casa" las exigencias que le hacen al Gobierno español para que respete la pluralidad, en alusión a la parte de la sociedad catalana que no comparte los postulados soberanistas.