El exdiputado socialista en el Congreso Eduardo Madina ha dicho hoy que el desarrollo de la actual legislatura dependerá "de la capacidad de ir trenzando mayorías" del nuevo Gobierno y que "no es fácil funcionar en un Parlamento con tanta distribución de fuerzas políticas".

El que fuese secretario general del Grupo Socialista en el Congreso entre 2009 y 2014 ha puesto como ejemplo de estas dificultades la votación del Consejo de RTVE, aunque ha precisado que el hecho de que el nuevo Gobierno "empiece a dibujar un tiempo nuevo" para la situación parlamentaria del país "ya es mucho".

Madina, que ha asistido al encuentro sobre terrorismo en los Cursos de Verano de la Universidad de Málaga "Radicalización violenta y terrorismo: desafíos contemporáneos a la seguridad", ha deseado que la moción de censura "deje atrás" una etapa de "ruptura de la cohesión social, de los derechos de los trabajadores, de corrupción y de malas decisiones".

Sobre terrorismo, ha explicado que el pacto antiterrorista está diseñado para un terrorismo "que viene de fuera", pero que en relación al terrorismo de ETA "las instituciones españolas y vascas deben avanzar en materia de memoria y educación", y trabajar para evitar que la situación se repita en el futuro.

Ha dicho que "estas deben ser las prioridades" cuando se discuta sobre el tema y que "no ve difícil un pacto entre fuerzas políticas dispares" para avanzar en ese sentido, ya que "desde que ETA no mata todo es mucho más fácil" y "las sinergias positivas entre partidos distintos hoy son mucho más sencillas".

El socialista ha elogiado el papel del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero en el proceso de paz y el empuje de la sociedad vasca, y ha considerado el anuncio del cese de la violencia que se produjo en octubre de 2011 como la fecha clave que puso fin a "una pesadilla de cinco décadas".

Según Madina, España y Euskadi son "indudablemente distintas" desde entonces, aunque ha reconocido que todavía "quedan muchos pasos por dar" en materia de memoria, convivencia y protección a las víctimas del terrorismo y a sus familiares.

En ese sentido, ha dicho que cinco décadas de violencia continuada, con más de ochocientas personas asesinadas, "han marcado a varias generaciones de españoles" y que "un trauma de ese calibre no se corrige de un día para otro".

Por ello, ha considerado especialmente importante "abrir espacios de convivencia" y dialogar para poder construir "una Euskadi de futuro en paz y en libertad".