(Actualiza con información sobre traslado de Rull, Turull y Forn)

Los nueve políticos independentistas presos quedarán reagrupados la próxima semana en Cataluña, con el traslado de los exconsellers Jordi Turull, Joaquim Forn y Josep Rull a la cárcel barcelonesa de Lledoners, donde permanecen ingresados desde ayer sus compañeros Oriol Junqueras, Raül Romeva y los Jordis.

También han pasado su primera noche en Cataluña la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y la exconsellera Dolors Bassa, concretamente en el módulo de mujeres de la prisión de Puig de les Basses de Figueres (Girona).

Según han informado a Efe fuentes penitenciarias, el traslado de los exconsellers de Presidencia Jordi Turull, de Interior Joaquim Forn y de Territorio Josep Rull se prevé para la próxima semana, después de que el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena dio luz verde el pasado martes, 3 de julio, a su acercamiento a Cataluña.

Estas fuentes han precisado que los tres exconsellers previsiblemente saldrán de la cárcel de Estremera (Madrid) el próximo martes, día 10, y serán trasladados en un furgón de la Guardia Civil hasta la prisión aragonesa de Zuera (Zaragoza), donde pasarán la noche y desde donde partirán hacia Cataluña, a donde se espera que lleguen el miércoles, día 11.

Turull, Forn y Rull se reencontrarán en la cárcel de Lledoners, una de las más modernas de Cataluña, inaugurada en 2008 en Sant Joan de Vilatorrada (Barcelona), con el exvicepresidente Oriol Junqueras y el exconseller de Exteriores Raül Romeva, con quienes coincidieron en la prisión madrileña de Estremera.

Además, también se encontrarán en Lledoners con el diputado de JxCAT y exlíder de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) Jordi Sánchez y el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, que en Madrid estaban en prisión preventiva por rebelión en la cárcel de Soto del Real.

Junqueras, Romeva y los Jordis han pasado su primera noche en el módulo 2 de la cárcel de Lledoners, que tiene capacidad para 128 internos y una ocupación de 95, en la línea de las otras áreas del centro, que oscilan entre los 80 y los 100 reclusos.

Tras la preceptiva revisión médica y la entrevista con los profesionales del centro penitenciario, a los cuatro presos se les asignaron anoche celdas en el módulo dos, que ocupan de manera individual.

Los cuatro presos podrán recibir a partir de mañana la visita de sus familiares, dentro del horario habitual en el centro, que habilita que se celebren estos encuentros los viernes, sábados y domingos.

A la espera de poder ver a sus familias, han sido los abogados de los internos los que se han reunido hoy con los políticos en prisión.

El letrado de Junqueras y Romeva, Andreu Van den Eynde, ha explicado, tras visitar a sus clientes, que les ha visto "bien de ánimo".

"Están recuperándose un poco del traslado, que siempre es una cosa un poco traumática, pero están muy bien de ánimo", ha indicado el abogado, en alusión a la conducción que afrontaron desde la cárcel de Estremera hasta la de Lledoners, con escala para hacer noche en la prisión de Zuera (Zaragoza) y una parada técnica en Brians-2.

Según el abogado, Junqueras y Romeva están ahora en un "nuevo escenario" que les da el "beneficio" de estar más cerca de sus familias y de sus abogados. "Pero no deja de ser el escenario de una cárcel. Y las cárceles, cárceles son", ha agregado.

Por su parte, la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y la exconsellera de Trabajo Dolors Bassa, que ingresaron ayer en la cárcel de Puig de les Basses, en Figueres (Girona), procedentes del centro penitenciario madrileño de Alcalá de Henares, también han pasado su primera noche en el módulo de mujeres de esta prisión, en celdas que ocupan de manera individual.

El módulo de mujeres de Puig de les Basses tiene una capacidad para unas sesenta internas y actualmente cuenta con 36 reclusas, según las fuentes.

Tanto Bassa como Forcadell, que también se han sometido a una revisión médica y a la entrevista con los profesionales del centro penitenciario, han recibido hoy la visita de sus abogados.

La consellera de Justicia, Ester Capella, ha insistido hoy en que los políticos presos tendrían que estar en libertad, pero ha resaltado que desde el Govern han trabajado "incansablemente" para que puedan estar cerca de su casa y no a 600 kilómetros, como ocurría cuando estaban en Madrid.

Por su parte, el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ha asegurado que es "imposible" la libertad de los presos independentistas y ha garantizado que no hay ninguna política "especial" ni "concreta" para ellos, ya que su acercamiento a Cataluña se está completando con "total normalidad" porque la ley "hay que cumplirla, guste o no guste".