El consejero andaluz de Empleo, Javier Carnero, ha contestado hoy a las denuncias del PP sobre gastos con tarjetas opacas en la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (FAFFE) asegurando que las liquidaciones de "una única" tarjeta, asociada a la dirección, suman 1.563 euros entre 2008 y 2010.

Carnero, quien ha subrayado en rueda de prensa la "absoluta colaboración" de la Junta con la Justicia, ha evitado manifestarse sobre "investigaciones en curso", al ser preguntado por la afirmación del PP-A de que se utilizaron "tarjetas black" para pagar servicios en un club de alterne.

Ha añadido que tendrá que ser ese partido el que tenga que demostrarlo o el juzgado el que tenga que determinar "si es cierto o no".

"Este consejero hace lo que es su obligación, colaborar con el juzgado", ha indicado Carnero, quien ha insistido en que sólo había una tarjeta asociada a la dirección de FAFFE, que en ese momento recaía en Fernando Villén, y el resto, simplemente, estaban limitadas para reposiciones de combustible.

Ha explicado que él no puede saber si hubo pagos y devoluciones con esa tarjeta porque sólo tiene acceso a las liquidaciones, aunque el juzgado sí tiene acceso a los saldos bancarios.

Las liquidaciones anuales reflejan 359 euros en 2008; 607 euros en 2009; y 597 euros en 2010.

Ha recordado que se trata de una investigación penal donde la Junta está ya personada, por lo que "ya se dirimirá lo que se tenga que dirimir" y el resto son "afirmaciones de un partido".

El consejero ha defendido que la Junta ha contestado siempre en plazo, fecha y forma los requerimientos de información del juzgado, algunos "incluso con menos de tres y cuatro días" de intervalo.

Ha detallado que desde el primer requerimiento, en enero de 2015, se está enviando la documentación, incluso de un módem y un portátil a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil para que pudieran acceder a los programas de contabilidad de la FAFFE.

La auditoría que se hizo entre 2015 y 2016 también se envió al juzgado, ha añadido Carnero, quien ha explicado que en marzo de este año se recibió una petición para facilitar la operativa de pago con tarjetas, algo en lo que se está trabajando ahora en la documentación.

Ha considerado que el hecho de darle a la UCO un ordenador supone que tengan "absolutamente la misma documentación" que se vuelve a requerir, pero aún así no tendrán problema "en volvérsela a dar en el formato que requieran", ha garantizado.