La mayoría del PP en la Comisión General de las Comunidades Autónomas del Senado ha impedido la reprobación del presidente de este órgano, Juan José Imbroda, por unas declaraciones ofensivas "contra políticos de ideología diferente", concretamente contra representantes institucionales catalanes.

La moción fue presentada hace más de un año por ERC y el PDeCAT en el Senado y pedía que la comisión reprobara a Imbroda por sus "declaraciones ofensivas contra políticos de ideología diferente y contra representantes institucionales de alguna de las comunidades".

También se reclamaba su inmediata dimisión y se instaba al PP a proponer a un nuevo candidato para presidir esta comisión.

El senador de ERC Miquel Àngel Estradé ha alegado que Imbroda hizo unas declaraciones en abril de 2017 "en las que faltaba al respeto e insultaba de manera ofensiva" a los independentistas catalanes, a quienes calificó como "pirados", aunque luego matizó sus palabras y cambió ese término por el de "desviados".

Imbroda, según alegan ERC y PDeCAT, no puede seguir siendo presidente de una comisión que requiere una voluntad expresa de neutralidad e imparcialidad, que no debe tener perjuicios ideológicos, ya que eso podría afectar al correcto desarrollo en la aplicación de sus responsabilidades, como la de fijar el orden del día o la duración de las intervenciones.

Para los dos grupos proponentes, Imbroda "ha ofendido a la mayoría parlamentaria del Parlamento de Cataluña, a su Gobierno y a los cerca de dos millones de catalanes que en el proceso participativo del 9N se declararon independentistas con su voto".

La moción fue presentada hace más de un año, antes del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.

Hacía más de un año que esta comisión no se reunía para un orden del día con contenido, ya que, aunque fue convocada en noviembre pasado, se hizo para un asunto de trámite. En marzo de 2017, sus miembros avalaron crear una ponencia en favor el pacto educativo, además de aprobar el pacto de Estado contra la violencia de género.

Para Josep Lluís Cleries, del PdeCAT, es "legítimo opinar, pero no insultar" a los catalanes y ha considerado que "no es bueno" para la comisión que la persona que lo preside diga" esas cosas, que es una falta de respeto.

Marcelino Iglesias, del PSOE, le ha dicho a Imbroda que pidiera disculpas antes de la votación, lo que no ha hecho, porque, a veces, en el debate político "se supera la línea" y se llega al insulto.

"Tiene mayoría -ha continuado- pero el resto de los grupos consideramos que no utilizó unas expresiones adecuadas".

Para la senadora del PP, Clara Isabel San Damián, son los representantes de las formaciones que suscribían la moción las que "reniegan" de su condición de españoles y desprecian a los 47 millones que lo son y ahora "vienen a pedir respeto", lo que resulta chocante.

Ha recordado que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha proferido numerosos insultos contra los españoles, así como otros políticos nacionalistas, por lo que no se cree "este ataque de dignidad pero si es así", les ha pedido que pidan la reprobación o la moción de censura de Torra en las instituciones catalanas.

"El PP no va a permitir -ha indicado- que el Senado sea el escenario del espectáculo que quieren montar y le recomendamos que ustedes se apliquen el cuento".